El subsecretario interino de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Ken Cuccinelli, dijo el jueves que su país está considerando enviar a solicitantes de asilo de cualquier nacionalidad, incluyendo mexicanos, a Guatemala.
El funcionario indicó que la medida se daría en el marco del acuerdo migratorio que tienen Washington con ese país. Luego, el ministro de Gobernación guatemalteco, Enrique Degenhart, dijo a Reuters que su país está la posibilidad de recibir mexicanos que buscan asilo en Estados Unidos.
“Estados Unidos y el Gobierno de Guatemala están colaborando estrechamente para continuar la aplicación del Acuerdo de Cooperación en materia de Asilo“, dijo Cuccinelli en su cuenta de Twitter.
“A medida que aplicamos plenamente el acuerdo, se está considerando a todas las poblaciones, incluidos los nacionales mexicanos“, añadió.
Sus comentarios se produjeron justo cuando Estados Unidos retomó el jueves el envío desde su territorio de vuelos con repatriados mexicanos, la más reciente medida de los gobiernos de ambos países para restringir los flujos migratorios.
“Sí es verdad que se ha analizado recibir mexicanos porque son nuestros vecinos (…)”, explicó por su parte Degenhart. “Ahorita solamente se está trabajando con centroamericanos pero es una posibilidad que no se descarta”.
El primer grupo de repatriados, 132 personas, llegó a la ciudad de Guadalajara, en el occidente de México, procedente de Tucson, como parte de un programa denominado Procedimiento de Repatriación al Interior de México (PRIM), que inició en 2013 y estaba suspendido en los últimos meses.
La cancillería mexicana dijo que los siguientes vuelos de este tipo se reanudarán en enero de 2020.
Dos fuentes de la sociedad civil dedicadas a la protección de migrantes en México dijeron a Reuters que algunos de los repatriados serían llevados a una casa de asistencia en Guadalajara.
Hasta ahora, Estados Unidos se había centrado en enviar a centroamericanos a su país o regresarlos a México a esperar una respuesta a su solicitud de asilo bajo el Protocolo de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés), que inició en enero.
Los centroamericanos constituyen un gran porcentaje de los deportados desde Estados Unidos. Los mexicanos enviados de regreso a su país han sido generalmente devueltos a la frontera entre Estados Unidos y México.
El presidente Donald Trump ha hecho del freno de la migración ilegal una de las principales prioridades de su mandato y de su campaña de reelección para el 2020.
El mandatario ha presionado a México y las naciones centroamericanas para que patrullen mejor sus fronteras en busca de frenar a los migrantes y ha hecho que quienes solicitan asilo en Estados Unidos esperen sus procesos fuera de territorio estadounidense o busquen refugio en otro lugar.
EFVE