Para proteger la vida y conservación de las ballenas, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Comisión de Áreas Naturales Protegidas, realizan operativos de vigilancia en mares mexicanos respecto al aprovechamiento no extractivo de observación o avistamiento de ballenas.
Dichos grupos supervisan que los prestadores de servicios cumplan con lo previsto en las autorizaciones emitidas por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Verifican que se cumplan las especificaciones de la Norma Mexicana NOM-131-SEMARNAT-2010, la cual establece lineamientos para el desarrollo de la observación de ballenas, así como su protección y la conservación del hábitat.
El objetivo principal de la norma es favorecer el desarrollo sustentable en la región en beneficio de las poblaciones locales y las economías estatales. Las autoridades ambientales explicaron que como parte del operativo revisan la autorización emitida por la Semarnat, la matrícula de la embarcación, número de pasajeros autorizados, entre otros aspectos.
Se informó que todas las especies de ballenas se encuentran clasificadas con alguna categoría de riesgo en la NOM-059-SEMARNAT-2010 y realizan esta vigilancia debido a que cada año arriba gran número de estos animales a los mares mexicanos.
El extra:
En aguas nacionales habitan al menos 9 especies de misticetos o cetáceos barbados, siete de ellos tienen presencia regular o permanente.
También vive una especie de odontoceto que puede ser objeto de aprovechamiento no extractivo a través de la observación.
En septiembre de 2019 se publicaron en el Diario Oficial de la Federación las fechas y lugares donde se puede llevar a cabo la observación de ballenas.
Incluye estados como Baja California, Baja California Sur, Nayarit, Jalisco, Sinaloa, Sonora, Oaxaca y Guerrero.
LEG