La automotriz japonesa Nissan reveló hoy un informe corporativo que afirma que su ex presidente Carlos Ghosn usó fondos de la compañía para eventos en el extranjero, como una fiesta en el francés Palacio de Versalles o invitaciones al Carnaval de Río, en Brasil.
El reporte fue enviado a la Bolsa de Valores de Tokio donde se indica que ese tipo de gastos sumaron alrededor de 3.9 millones de euros por lo menos (4.35 millones de dólares), y no tuvieron nada que ver con su alianza con la francesa Renault u otros fines corporativos.
Otros gastos corresponden a cenas de Ghosn en el Marmottan Museum en París, regalos comprados en joyerías como Cartier y gastos de una firma de abogados en Líbano, a donde el ex ejecutivo huyó a principios de mes quejándose del sistema judicial japonés que lo había enjuiciado.
Hubo también donaciones por alrededor de 2.37 millones de euros a 10 instituciones, la mayoría en Líbano, que hizo la compañía holandesa RNBV, filial de la alianza, a nombre de Ghosn, pero sin tener que ver con los negocios corporativos, además de vuelos privados.
El gasto abarcó al sucesor de Ghosn, Hiroto Saikawa, que recibió un salario que se consideró excesivo, al igual que a otros seis ex ejecutivos que Nissan espera le rembolsen los pagos de más el próximo marzo, señala el documento citado por la agencia Kyodo.
Nissan precisó que tras la experiencia de Ghosn, ha decidido que sus ejecutivos de alto nivel no tengan funciones concurrentes como ejecutivos o empleados de Renault o Mitsubishi, sus subsidiarias o afiliadas.
También se han eliminado los cargos de asesor y consultor, que se daban a los directores en retiro, además de que se ha decidido imponer castigos a tres empleados por mala conducta financiera.
El reporte de la automotriz japonesa atiende la petición de la Bolsa de Valores de Tokio para mejorar sus controles internos, pues sus prácticas violaron las normas bursátiles con acciones que podrían afectar las decisiones de inversión.
EFVE