Alrededor de 95 mil académicos, estudiantes, trabajadores y funcionarios de diversas entidades y dependencias de la UNAM participaron en el primer Macrosimulacro de tres que habrá en 2020.
Raúl Flores Mendoza, director de Protección Civil de la Secretaría de Prevención, Atención y Seguridad Universitaria (SPASU), afirmó que los universitarios asumieron este ejercicio con responsabilidad, orden y calma.
Aunque esta actividad no se dio al 100 por ciento porque algunas entidades continúan el asueto académico, “la participación fue provechosa, por lo que buscamos fomentar este ejercicio como un hábito para tomar medidas y saber qué estamos haciendo bien o qué aspectos debemos mejorar”.
Los simulacros permiten minimizar riesgos y evaluar medidas, dijo.
Xyoli Pérez Campos, jefa del Servicio Sismológico Nacional (SSN), informó que este ejercicio tuvo como escenario un sismo cortical intraplaca, es decir, un evento que hipotéticamente ocurrió en la placa de Norteamérica, cuatro kilómetros al sur de Temascalcingo, en el municipio de Acambay, Estado de México, hacia el norte de la Ciudad de México, con una magnitud de 7.0, y una profundidad de ocho kilómetros.
En punto de las 11 horas, tras la sonoridad de la alerta sísmica (que no es operada por el SSN), personal que labora en la Torre de Rectoría evacuó el edificio. Fueron desalojadas la parte baja del inmueble, correspondiente al basamento, la planta principal, mezanine y primer piso.
Este ejercicio fue realizado bajo la llovizna, y se emprendieron los protocolos de seguridad, con la participación de brigadistas e integrantes de Atención de Emergencias de Protección Civil UNAM.
fahl