Los puntos de medición de la estrategia nacional de seguridad pública están en el conteo mensual/anual del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Y ahí las cifras de todo el año de 2019 confirman que la tendencia de violencia llegó a un punto de inflexión y está siendo contenida.
Los datos del año pasado apenas ilustran los resultados de cuando menos una decena de medidas de reorganización federal de la seguridad pública. Si gobernadores y alcaldes hubieran puesto algo de su parte, las cifras hubieran sido aún menores.
La lectura de las cifras de 2019 debe cruzarse con la tendencia que venía de la segunda parte del sexenio de Peña Nieto: 2% en 2019, contra un promedio de aumento anual de los homicidios dolosos de 23% promedio anual en 2015-2018.
La contención de la violencia criminal ha correspondido a las autoridades federales, sobre todo a la Guardia Nacional. A escala local, la sociedad sigue castigando a policías estatales y municipales. La encuesta de percepción de inseguridad del INEGI encontró que el nivel de confianza social en los policías estatales es de 48.4% y en los policías municipales de 40.4%, ambos de la mitad de la cifra de confianza social en el Ejército y la Marina.
Pero ni con estos mensajes de la sociedad ha habido reacción de gobernadores y alcaldes. En cifras, los cinco estados con mayor homicidio doloso por cada 100 mil habitantes fueron Colima, Baja California, Chihuahua, Guanajuato y Guerrero. Y a nivel de peor percepción social están las ciudades de Puebla, Tapachula, Ecatepec de Morelos, Uruapan, Fresnillo y Tlalnepantla, con expectativas de inseguridad arriba de 90%.
De mantenerse el ritmo de la estrategia de seguridad y si se suman los gobernadores y alcaldes, las cifras de violencia criminal seguirán bajando.
Zona Zero
- La crisis de migración y el uso de la Guardia Nacional para contener a migrantes que se metieron de manera ilegal a territorio mexicano han sido responsabilidad del Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, por sus acuerdos con la Casa Blanca. Además, Ebrard está a cargo de inversiones de desarrollo de México en Centroamérica que no han despertado expectativas entre los habitantes. Sin la Guardia, México estaría siendo invadido por miles de personas sin control legal de las fronteras.
(*) Centro de Estudios Económicos, Políticos y de Seguridad.
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