El Estado no genera alternativas a niños y niñas para vivir en un país más seguro, por lo que es necesario crear estrategias de senderos seguros en las comunidades, alcaldías y con los vecinos alrededor de planteles educativos para que los estudiantes lleguen caminando a sus escuelas, dijo Juan Martín Pérez García, director general de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).

En entrevista con 24 HORAS, respecto a la propuesta del Gobierno de Coahuila de que los niños utilicen “mochilas transparentes”, Pérez García dijo que es una “burla y una ofensa nuevamente al derecho a la privacidad”, así como la implementación del programa “mochila segura”.

“El criterio simple y sencillo es que cualquier cosa que propongan tendría que ser aplicable a todos los adultos que van a las escuelas. La pregunta es si los maestros van a aceptar llevar bolsos transparentes. Si el personal de mantenimiento va a llevar bolsos transparentes; no se puede porque eso no esta en su Contrato Colectivo de Trabajo, es discriminatorio, ofende la dignidad de los niños y por supuesto que no resuelve el tema”.

A su parecer, “es un engañabobos la mochila asegura, la cual nos distrae del tema de fondo, los niños y niñas no son el peligro; niños, niñas y adolescentes están en peligro. Cada día asesinan a 3.6%, desaparecen a siete, cuando son víctimas de un hecho delictivo, de cada 100 carpetas de investigación, sólo tres alcanza un tipo de proceso o sentencia, hay impunidad”.

El director del Redim reiteró que implementar estos dos programas es violatorio de la privacidad y la intimidad protegida en el artículo 16 de la Constitución: “nadie puede ser molestado en su propiedad y sus pertenencias, sin orden judicial, y viola el derecho a la presunción de inocencia”.

 

¿Qué opina sobre la implementación de detectores de metales en las escuelas?

-Hay una industria de seguridad de tras que tiene cabilderos en todos lados, porque esto cuesta dinero, esto no es gratis. Cada arco metálico y detector de metales cuesta la renta y estos tiene que ser certificados por la Secretaría de Energía, por la cantidad de radiación que emite.

También los binomios caninos, el personal de seguridad, más allá de las policías municipales y estatales, incluso la Guardia Nacional, todo eso cuesta dinero.

Claramente hay una industria de la seguridad que está promoviendo esta criminalización de niños y niñas para que se instalen detectores de metal. Entonces, si creo que no hay que ser ingenuos porque es muy lamentable que se ponga un interés económico de industria de seguridad sobre los intereses de la niñez, particularmente sobre sus derechos.

¿La instalación de detectores de metales, no es una solución para evitar que los niños no porten ninguna arma dentro de la escuela?

-De ninguna manera representa ninguna ventaja, porque los arcos detectores de metales, como ya se ha demostrado en aeropuertos y establecimientos son fácilmente vulnerables. Es decir, después del arco metálico todo lo demás no es detectable. Entonces, la experiencia que se tiene en todos lados es que los arcos metálicos por sí solos no funcionan en absoluto. Ni tampoco es posible que el establecimientos escolar quede sellado. No hay ningún sentido.

¿Qué debe hacer la sociedad, los padres, maestros para ayudar a niños, niñas y adolescentes a protegerlos de la violencia y fomentar una salud emocional sana?

-Fundamental construir confianza y esa confianza se hace hablando, dialogando y reconocerle a ellos en equivalencia human que valen lo mismo, pero tenemos que escucharlos y generar confianza, esa es la mejor forma de proteger a los niños y niñas e involucrarlos en todos los temas que les afecta, hacerlos participe de la casa, de la comunidad y de la escuela.

¿A qué atribuye el incremento de suicidios en menores de edad?

-Hay varios detonantes, tenemos una sociedad con menos vínculos afectivos al interior de las familias, en las comunidades, escuelas, por eso es por lo que cuestionamos mochila segura, porque lo que hace es que mete el espíritu policiaco y de violencia a las escuelas. Pedir a los padres y madres de familia que revisen las mochilas es romper el rol de confianza que debemos tener con nuestros hijo e hijas y nos convertimos en policías, y nadie confían en quien te vigila. Confías en alguien que te acompañe, que te cuida, que dialoga, pero si te vigilan ya no eres objeto de confianza.

¿La Redim qué recomendaría cómo medidas de seguridad dentro de las escuelas públicas y privadas?

De manera inmediata niños, niñas, papás y mamás tiene que crear comunidades seguras. Hay cosas muy puntuales como crear chats grupales donde estén niños, niñas y papás; y estarse comunicando no solamente para ir por ellos a la escuela o saber a qué hora salen y demás, sino, para tener una respuesta inmediata ante cualquier tema de seguridad.

Otro apartado grande, es el que tiene que ver con la violencia generalizada que vive este país. Tenemos que explicarle a los niños y niñas. Por ejemplo, en la modificación de los libros escolares debería venir una explicación de la guerra contra el narco, las casi 400 mil personas asesinadas, 61 mil desaparecidos y todo lo que ha significado la crisis de derechos humanos.

Esto podría ayudar a los niños y niñas a entender, por un lado, las obligaciones del Estado y la corresponsabilidad de la familia en la escuela y lo que al interior de las familias y ellos mismos pueden hacer para protegerse.

Frase

“Es un engañabobos la mochila asegura, la cual nos distrae del tema de fondo, los niños y niñas no son el peligro”.

Juan Martín Pérez García, director general de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).

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