El Senado estadounidense resolvió el día de ayer que la votación final del juicio político, mejor conocido como “impeachment”, contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se realizará durante la tarde del próximo miércoles 5 de Febrero.
La destitución o continuidad del mandatario se definirá en la Cámara Alta después de una sesión más de conclusiones y posicionamientos finales de los legisladores, la cual quedó programada para el lunes, según se presentó la información en el documento resolutivo presentado por el líder de la mayoría republicana, Mitch McConnell.
Los senadores esperan culminar este episodio a más tardar a las cuatro de la tarde del miércoles, después de dos semanas de arduo debate donde tanto los demócratas como los republicanos y la defensa de la Casa Blanca tuvieron su oportunidad de probar en el pleno si Trump cometió o no los delitos imputados.
Las acusaciones contra Donald Trump por obstrucción al Congreso y abuso de poder provienen de la Cámara de Representantes, donde la dirigente demócrata, Nancy Pelosi, comenzó este proceso legislativo ante presuntas presiones del presidente al gobierno de Ucrania para espiar al ex vicepresidente Joe Biden.
La resolución del Senado establece claramente que no habrá más debate después de la votación, esto, en concordancia con la intención de los representantes republicanos de agilizar el final del “impeachment” y dar paso a lo que sigue en la agenda política, que son las primarias rumbo a los comicios de 2020, donde Trump podría buscar su reelección.
Este viernes, el Legislativo desechó la propuesta demócrata de llamar a nuevos testigos y traer más documentos para demostrar que el presidente es culpable de los delitos imputados. El grupo de oposición no logró los cuatro votos republicanos necesarios para conseguir este pequeño triunfo en el camino a la destitución de Trump. Posteriormente se desecharon otras cuatro mociones del partido minoritario.
Nancy Pelosi respondió la noche de este viernes a lo acontecido en el Senado y acusó a los senadores de ser “cómplices” de Donald Trump y afirmó que hoy es un día triste para Estados Unidos, donde la mayoría republicana se colocó por encima de la ley.