La reina Isabel II hizo su primera aparición oficial desde el inesperado anuncio del mes pasado del príncipe Enrique y Meghan de que abandonarán sus deberes reales y serán financieramente independientes.
La monarca, quien celebra esta semana sus 68 años en el trono, visitó la base de la Fuerza Áerea Real en Marham, al este de Inglaterra, para asistir a una exhibición y conocer a los soldados en entrenamiento.
Esta fue la primera salida oficial de la reina desde que su nieto Enrique y su esposa estadounidense Meghan sacudieron a la Casa de Windsor al anunciar su deseo de retirarse de algunos deberes reales y pasar más tiempo en Canadá y Estados Unidos.
Isabel terminó decidiendo que no serían considerados miembros en funciones de la monarquía británica, que ya no usarían sus títulos de “alteza real” y que serían financieramente independientes.
Desde su última aparición pública, hubo renovados reportes acerca de los lazos de su segundo hijo, el príncipe Andrés, con el fallecido financista estadounidense Jeffrey Epstein luego de que el fiscal de Manhattan Geoffrey Berman dijo que había aportado “cero ayuda” a las autoridades de Estados Unidos.
Al visitar la base aérea de Marham en su rol de Comandante Aéreo Honorario, Isabel usó un atuendo de color durazno y sonrió al estrechar la mano del personal.
La base, que emplea a más de 3.600 personas, abrió en 1916 para defender el condado británico de Norfolk de los ataques de aviones alemanes durante la Primera Guerra Mundial. Ahora alberga el avión de combate F-35B Lightning.
El heredero al trono, el príncipe Carlos, y su hijo mayor, el príncipe Guillermo, sirvieron como pilotos de la Fuerza Aérea Real, mientras que el príncipe Enrique voló en la Fuerza Aérea del Ejército como parte de su carrera militar de 10 años que culminó en 2013.
CS