La automotriz japonesa Toyota inauguró su segunda planta armadora en México, en Guanajuato, donde destinó una inversión de 700 millones de dólares, esto a pesar de los elevados niveles de inseguridad y de delitos como el robo de combustible, conocido como huachicol, sumado a una desaceleración de la industria de producción y venta de vehículos en el país.
La nueva planta ubicada de Toyota en Apaseo el Grande, Guanajuato, dará empleo a unas 1,300 personas y tiene una capacidad para ensamblar 100,000 unidades de la camioneta Tacoma que irán, principalmente, a los mercados estadounidense y mexicano.
Toyota anunció la construcción de su nueva planta en abril de 2015, que se añade a la que tienen en Baja California desde 2002. En ese momento planeaba inyectar 1,000 millones de dólares e iniciar la producción en el país del Corolla, su modelo más vendido en el mundo.
orolla, que actualmente se produce en Canadá. Con estas nuevas instalaciones la armadora abastecerá el mercado estadounidense, en donde logró ventas por 2,3 millones de unidades en 2014, 6,2% más que en 2013.
Las previsiones de Toyota cuando anunció la construcción de su nueva planta, incluía una inversión mayor de mil millones de dólares, permitiendo la generación de dos mil puestos de trabajo.
Sin embargo, ante la baja demanda de autos compactos en Estados Unidos, decidió reducir su inversión a 700 millones de dólares y dedicarse a armar más el modelo Tacoma.
El año pasado, la fabricación local y exportación de vehículos retrocedieron y para 2020, la industria automotriz establecida en México estima una nueva caída.
Sin embargo, la ratificación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) le daría mayor certidumbre a este golpeado sector, fundamental para la economía mexicana.
Durante la ceremonia de inauguración de la plana, los directivos de la empresa reconocieron que les preocupan los problemas de inseguridad en Guanajuato y por ello sostuvieron que han mantenido pláticas con el gobierno federal, estatal y municipal, para colaborar en lo que sea necesario para frenar los delitos.
El presidente de Toyota Motor Manufacturing Guanajuato, Juan Francisco García López, detalló que existe un diálogo con las autoridades para buscar mejorías en la integración social y en la reducción de los niveles de inseguridad que “nos afecta a todos”.
“Estamos en diálogos con distintas autoridades para buscar opciones de cómo podemos nosotros contribuir para mejorar las condiciones, la estabilidad social y en específico la seguridad”, dijo.