Detenido en Málaga, España, Emilio Lozoya podría convertirse en la llave que abra el sótano de la alta corrupción en México.
La amenaza-advertencia –no se mandaba solo- que su abogado, Javier Coello, ha mandado a los superiores de quien fuera director de Pemex no permite lugar a dudas: Emilio Lozoya, si se hunde, se llevará a sus jefes con él.
Durante el periodo neoliberal, los Gobiernos de México decidieron llevar a Pemex a la quiebra para entregar la riqueza energética al capital privado. Lozoya, entonces, hizo bien el trabajo que le encomendaron.
Y si “él no se mandaba solo”, lo que podemos esperar es que el abogado Coello pida la comparecencia de Peña Nieto, de Luis Videgaray y de los miembros del Consejo de Administración de Pemex para que, ante un juez, declaren quién le ordenó a Emilio Lozoya comprar Agronitrogenados, Fertinal y los astilleros en España.
Peña y Videgaray, también tendrían que responder por el presunto financiamiento de Odebrecht a la campaña del PRI en 2012, a cambio de contratos con Pemex una vez que el mexiquense fuera presidente de México.
La detención de Emilio Lozoya cobra relevancia para el Gobierno del presidente López Obrador como ningún otro caso de corrupción en México, la detención de este personaje es la entrada al círculo más íntimo de Peña Nieto.
Si lo que ha dicho el abogado Coello de que su cliente solo actuaba bajo las órdenes de sus jefes, estaremos ante un juicio que podría desnudar el entramado en el que se finca el sistema de corrupción que operó en México en los últimos 35 años.
Lo mejor de todo es que, si Lozoya se decide, podría hacerle un servicio al país y entonces sabremos, a ciencia cierta, hasta donde llegaron los neoliberales para quedarse con la riqueza de este país.
Y los jueces de México también tienen una oportunidad de ponerse al servicio de la nación. Ya sin las amarras que les hacían cómplices de los hombres del poder, estará en sus manos procesar a los saqueadores que aprovecharon los cargos públicos para enriquecerse brutalmente.
Hoy, con Lozoya en proceso de extradición, está cerca el castigo para los corruptos.
Solo faltaría que ese castigo sea ejemplar para que el incentivo para corromper y dejarse corromper solo sume cero.
La Letrina. En España, hay un proceso judicial en contra de OHL, la empresa favorita de los Gobiernos del Estado de México para hacer negocios. Esa empresa es acusada de sobornar políticos con el dinero de las extremas ganancias en esa entidad y el nombre de Emilio Lozoya es muy importante en ese juicio anticorrupción.
@Fercoca