Luego de una investigación interna del Ministerio de Asuntos Exteriores sobre los hechos suscitados entre dos diplomáticos españoles en la Embajada en Bolivia para diciembre del año pasado concluyeron en que ninguno actuó por libre, sino que fue bajo el mandato del entonces secretario de Estado de Cooperación, Juan Pablo de Laiglesia.
Al realizar su visita a la embajada, los diplomáticos españoles se apegaron a las indicaciones recibidas que en ningún momento buscaban sacar de la residencia mexicana a los colaboradores del ex presidente Evo Morales, tampoco tener contacto con ellos.
Cabe destacar que la Cancillería mexicana respondió a las acusaciones de funcionarios del gobierno de Jeanine Áñez sobre posibles violaciones al marco legal del país e incumplimiento al derecho internacional, al refrendar el compromiso de México con la figura del asilo diplomático.
“El asilo es un acto de política exterior que se enmarca en el ejercicio de nuestra soberanía y es congruente con nuestra política de derechos humanos, incluido el que toda persona tiene derecho a solicitar asilo por motivos o delitos de carácter político”, informó el comunicado de la Secretaría.
DAMG