Las protestas sociales contra el gobierno de Sebastián Piñera, que cumplen ya poco más de cuatro meses, marcaron esta noche el arranque de la edición 61 del Festival Viña del Mar.
Los manifestantes, que exigen transformaciones en la política social de Piñera para reducir la desigualdad en Chile, impulsaron la consigna “Sin justicia no hay festival” y rondaron la Quinta Vergara, la sede histórica de la cita, que incluye la participación de músicos de alcance internacional y números de comedia.
Los asistentes a la Quinta Vergara corearon consignas contra el mandatario como ha venido sucediendo en los últimos meses en congregaciones sociales masivas, como los partidos de fútbol.
“Piñera conchetumare, asesino igual que Pinochet”, vociferaron los asistentes al recinto de espectáculos.
Además, los inconformes también concurrieron en torno al hotel O’Higgins, que concentra a la mayoría de los artistas incluidos en la cartelera del evento artístico.
Medios alternativos como la organización periodística “Piensa Prensa” difundieron videos grabados por ciudadanos que muestran un fuerte despliegue policiaco en las calles de Viña del Mar para contener las manifestaciones.
El cantante puertorriqueño Ricky Martin, que participó en la inauguración y recibió una “Gaviota de plata” de los organizadores, expresó su respaldo a los manifestantes.
“Que se expresen, que exijan lo básico, los derechos humanos”, expresó Ricky Martin a favor de los manifestantes.
Este domingo, las Juventudes Comunistas de Chile convocaron a un cacerolazo para el miércoles 26 en el metro Zapadores, con el que buscan impulsar el voto por la opción “Apruebo” en el plebiscito constitucional que se celebrará en abril.
“¿Se puede hacer un show como Viña 2020 escondiendo a los muertos y mutilados bajo la alfombra? Queda claro que no y así lo sabe la gente de los cerros de Viña. Cansados de miseria y desigualdad, hoy bajan al plano a terminar con el pan y el circo. Sin justicia no hay festival”, manifestaron las Juventudes Comunistas.
DAMG