Parece ser que el deporte en Miguel Hidalgo continuará cargando un mal estigma en esta administración. En los últimos meses he recibido quejas de usuarios y vecinos del deportivo Plan Sexenal por temas diversos, incluso algunos dignos de análisis por la afectación a los derechos de los usuarios
Actualmente la alberca olímpica de este deportivo se encuentra en remodelación, esto pareciera una buena noticia, sin embargo la Alcaldía determinó continuar con el cobro a pesar de que los usuarios no reciben el servicio desde el mes de octubre de 2019, condicionando el conservar su lugar en la actividad al término de la remodelación al pago oportuno durante lo que reste de la obra.
Lo anterior se justifica en la interpretación amañada, por decir lo menos del documento que se le da a firmar a los usuarios como una suerte de lineamientos para la instalación y que es elaborado por el mismo gobierno de la alcaldía. A este caso se suma el cobro por el uso de baños que se encuentran fuera de servicio en el gimnasio Cuauhtémoc, quejas de vecinos por partidos de fútbol que terminan a altas horas de la noche afectando a vecinos.
También están los videos que circularon en redes sociales de enfrentamientos entre la responsable de este deportivo con usuarios y quejas por amenazas veladas en mensajes de texto cuando reclaman servicio o un trato digno. La falta de planeación y atención oportuna a equipos para la asignación de espacios que les permitan mantener un ritmo de entrenamiento necesario para competencias locales, nacionales o internacionales, entre otras.
Hechos como estos nos obliga a la reflexión sobre, si es cierto que el servicio en instalaciones públicas debe ser de mala calidad. En lo personal creo que que la respuesta es un rotundo ¡NO!
La falta de planeación, mala interpretación de la norma, prepotencia o falta de criterio es responsabilidad en principio de quien definió, quién o quienes serán las personas que deberán marcar las directrices dentro de estos espacios y las mejoras tampoco deberían traducirse en una doble tributación a pagar por los usuarios que ya con sus impuestos pagan la obra, sin dejar de pagar su cuota mensual por clases que no reciben, para apartar un lugar que les puede ser quitado a capricho.
El plan sexenal tan solo de enero a diciembre de 2018 generó un monto superior a 13 millones de pesos, para el 2020 el Alcalde en reunión de trabajo con los diputados solicitó 20 millones adicionales para rehabilitación de esta instalación. Lo datos anteriores nos harían pensar que este deportivo es importante para la Alcaldía y los recursos que genera y recibe adicionalmente deberían de alcanzar para amortiguar la disminución en el cobro de cuotas por obras excepcionales como la de la alberca olímpica, priorizando el fomento al deporte.
Sin embargo al tratar de entender lo que sucedía encontré que la administración de este deportivo se entregó a quien en su momento se ostentó como secretaria general de MORENA en esta Alcaldía y ya en 2015 había sido señalada por manejo de programas fuera de la norma en alguna columna periodística, historia que se ha vuelto común en la 4T, por lo que con esta reflexión me gustaría hacer una invitación a los alcaldes de la CDMX para evaluar a quienes han designado, promover el profesionalismo no solo en áreas administrativas sino respecto al nivel técnico deportivo, todo esto es en beneficio de los niños, niñas, adolescentes y cada persona que se preocupa por su salud, compiten o tan solo de manera recreativa desarrollan una actividad deportiva. No se trata de fingir que hacemos algo, se trata de hacerlo mejor que nadie, ¡ahí les encargo!