Cinco años después de la última visita presidencial estadounidense a la India (Barack Obama, en 2015), y cinco meses luego que el primer ministro indio, Narendra Modi, visitara Texas, el presidente Donald Trump fue recibido ayer con bombo y platillo en el país de Ghandi.
Sin embargo, el escenario fue contrastante.
Modi calificó de histórica la visita de Trump en su país, ya que, entre otras cosas, permite dar la bienvenida a “la democracia más grande del mundo”. Agregó que, con la llegada del inquilino de la Casa Blanca se hace “una nueva historia”. Durante el evento “Namaste Trump”, en el estadio Motera, en Gujarat, dijo que los lazos entre la India y Estados Unidos han llegado a nuevos niveles y no sólo se trata de compañerismo entre las naciones.
La recepción fue una de las mayores ofrecidas en el país a un mandatario extranjero.
Trump anunció la venta a la India por valor de 3 mil millones de dólares de los “helicópteros más avanzados” y otro material militar.
Mientras tanto, las manifestaciones en la capital dejaron tres civiles y un policía muertos por enfrentamientos en las calles contra una ley de migración.
Estos violentos enfrentamientos ocurrieron entre quienes están en contra y a favor de la ley que vetará a migrantes musulmanes de acceder a una visa o a la nacionalidad, en una segunda jornada de protestas.
La violencia entre ambos bandos incrementó ayer, cuando se ubicaron grupos paramilitares entre los asistentes a los enfrentamientos, que también han provocado al menos 50 heridos, ya internados en clínicas y hospitales.
Los manifestantes de ambos bandos quemaron casas, autos y camiones, además de emplear piedras para defender la ocupación de ciertos espacios y enfrentarse a sus rivales.
La Policía local, conformada por ocho comandos de 100 integrantes cada uno, empleó gases lacrimógenos para controlar a los manifestantes, aunque estas medidas incrementaron los niveles de violencia.
Por la noche, las autoridades comunicaron la imposición de una ley que prohíbe que más de cuatro personas se reúnan, de incumplirla, se impondrán sanciones penales.
La polémica ley contra la que se manifiestan en la capital señala que los migrantes de los países vecinos podrán ser nacionalizados a futuro, a menos que practiquen el islamismo, en ese caso serán deportados y no se les permitirá habitar la nación.
Quienes están en contra sostienen que se trata de un delito, ya que se discrimina a los migrantes por su religión.
FRASE
“Durante su discurso en el #NamasteTrump, el Presidente destacó su visión. Habló sobre la grandeza de la India, de nuestra cultura. Le agradezco sus amables palabras”
Narendra Modi
Primer ministro de la India
LEG