El ex productor de cine Harvey Weinstein estaba recibiendo atención médica por un dolor en el pecho en el Hospital Bellevue de Manhattan el martes, dijo su portavoz, un día después de que un jurado de Nueva York le condenó por agresión sexual y violación, en una gran victoria para el movimiento #MeToo.
Weinstein, de 67 años y otrora una de las figuras más poderosas de Hollywood, fue condenado por agresión sexual contra la ex asistente de producción Mimi Haleyi en 2006 y por violación contra la aspirante a actriz Jessica Mann en 2013.
Más de 80 mujeres han acusado a Weinstein de agresiones sexuales, algo que él rechaza, asegurando que todos los encuentros sexuales fueron consentidos.
Las acusaciones ayudaron al crecimiento del movimiento #MeToo en las redes sociales en 2017, inspirando a que más mujeres contaran públicamente las malas experiencias sufridas ante hombres poderosos.
Juda Engelmayer, portavoz de Weinstein, dijo el lunes que el ex magnate del cine fue trasladado al Hospital Bellevue, que tiene una unidad de cuidado médico para presidiarios, después de abandonar esposado el tribunal. Si no hubiera sido por la preocupación sobre su salud, habría sido conducido al complejo penitenciario neoyorquino de Rikers Island.
Weinstein continuaba hospitalizado el martes como “medida de precaución” tras haberse quejado de un dolor en el pecho, y esperaba una visita de su equipo legal a lo largo del día, afirmó Engelmayer.
Tras el veredicto del lunes, Arthur Aidala, uno de los abogados de Weinstein, citó a su cliente diciendo: “Soy inocente. Soy inocente. ¿Cómo puede ocurrir esto en Estados Unidos?”.
La audiencia de su sentencia está programada para el 11 de marzo. Su abogado dijo que apelará.
PAL