Tan bien que iba el tema, hasta que topó con una sugerencia presidencial.
Aunque la nueva reglamentación para el uso lúdico de la mariguana fue aprobada en lo general en las Comisiones del Senado, el dictamen no será subido hoy al pleno y es posible que espere días u quizá semanas antes de que pueda ser discutido.
El punto es que para algunos legisladores, el dictamen que se redactó es muy laxo, es decir, deja puntos pendientes o a la interpretación de la autoridad lo cual lo hace inviable por el momento.
El dictamen aprueba aumentar de 5 a 28 gramos de cannabis para uso personal lúdico, pero hay quienes piensan que debería aumentarse hasta 200 gramos.
Si quienes consumen mariguana aseguran que con 28 gramos se pueden hacer hasta 60 cigarrillos, imagínese cuántos podrían hacerse con 200 gramos.
No está claro cómo la autoridad puede evitar la comercialización y cómo puede supervisarse que se cumpla con la regla de tener hasta 20 plantas para consumo personal.
¿Quién podría supervisar, casa por casa, que realmente se cumple con este ordenamiento?
Tampoco queda claro cómo es que se transportaría, ni quién, a pesar de que está establecido que será el Gobierno quien, a través de un instituto de nueva creación, se encargará de todo lo referente al cultivo, transporte, comercialización, distribución y venta de la cannabis.
En una reunión con senadores, el presidente López Obrador reconoció no estar de acuerdo con la reglamentación para el uso lúdico, pero no se opuso a que el tema avanzara en la Cámara de Senadores.
Será hasta el momento de la discusión en el pleno cuando se conozca si esa posición del Presidente influirá en su bancada a la hora de la votación.
Los cannabis-lovers no pueden cantar victoria, por el momento, a pesar de que se aprobó en lo general, el dictamen que por años han peleado.
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Casi en secreto el PRI conmemoró -eso no fue una celebración- sus “primeros 91 años’’.
Atrás quedaron los años en los que la avenida Insurgentes en su cruce con Violeta se paralizaba ante la llegada de personajes que gobernaron esté país por casi 80 años.
Una conmemoración austera, en donde el acto más significativo fue la entrega de la presea Jesús Reyes Heroles al ex gobernador del estado de México y el último presidente del PRI con saldo ganador, César Camacho Quiroz.
Lo demás fueron abrazos más que de festejo de consuelo.
El PRI está borrado como oposición a pesar de que en ambas Cámaras del Congreso cuenta con personajes con el suficiente bagaje para convertirse en oposición.
Pero no lo han hecho y posiblemente no lo harán en este sexenio.
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Lo que está pasando en las conferencias mañaneras del presidente López Obrador debería ocupar al mandatario y a su vocero, Jesús Ramírez, a preguntarse si la estrategia de comunicación es la correcta.
El enfrentamiento protagonizado ayer por los “youtubers’’ y los reporteros de medios impresos, radio y televisión, no ha sido el primero y seguramente ni el último, pero sí el que más evidencias de desencuentros entre “la fuente’’ dejó.
Las mañaneras se han convertido, porque así lo ha permitido el propio Presidente, en un espacio para la gestión de asuntos personales o de grupo; en una oficialía de partes en la que lo mismo se reciben peticiones para “investigar a quienes financian el movimiento sin mujeres’’ hasta el encarcelamiento de personajes, con nombres y apellidos, que ni siquiera tienen una investigación en su contra.
Lo que pasó ayer no fue un ejercicio de libertad de expresión, sino el libertinaje con el que se conducen quienes se sienten voceros del Gobierno lopezobradorista.