MADRID.- Felipe VI informó hoy que renunciará a la herencia de su padre, el rey emérito Juan Carlos I, a quien la corona le retirará la asignación anual de 200 mil euros, como consecuencia de las dudas que se han establecido después de que se investigara al padre del actual monarca.
En un comunicado emitido por la Casa Real, Felipe VI anunció que tampoco recibirá “cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonancia con la legalidad y los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional o privada”.
Este documento refiere de forma indirecta las denuncias realizadas y las investigaciones originadas por la fiscalía de Suiza sobre los activos que han ingresado a las cuentas del rey emérito español, así como los recursos en sus fundaciones que no tienen un claro origen y de los que se sospecha su ilegalidad.
En este documento el actual monarca asegura que desconocía, hasta marzo del año pasado, la disposición de su padre a dejarle el dinero de la Fundación Lacum, así como a la princesa de Asturias, por lo que no recibirán, ninguno de los dos, dichos fondos.
Aseguró que no tenía conocimiento alguno de que su nombre o el de su hija fueran empleados para participar en la administración de recursos, por lo que solicitará el retiro de sus nombres como beneficiarios o participantes en cualquiera de ellos.
La firma que le comunicó que sería beneficiario de los recursos es Kobre&Kim, la cual en una época llevó los casos de Corinna Larsen, ex pareja sentimental del rey emérito y quien ha sido señalada como receptora de 65 millones de euros triangulados, probablemente desde las cuentas del rey Juan Carlos.
El actual rey designó al abogado Javier Sánchez-Junco Mans como el responsable de su defensa frente a estos hechos que no tienen precedentes en el comportamiento moderno de la corona.
De esta manera Felipe VI se deslinda de las posibles actividades ilegales de su padre y remarca que su labor dentro de la corona es inspirar “principios morales y éticos” a la población española.
MGL