En España, la situación de los funerales por las víctimas mortales a causa de coronavirus se agrava. Los españoles tienen que pedir por teléfono los servicios funerarios, pues se encuentran confinados al haber estado en contacto con sus familiares infectados.
El gerente de la Funeraria Anoia señaló que los difuntos están dentro de una bolsa hermética y se depositan los cuerpos directamente para incinerar o inhumar.
El Ministerio de Sanidad y la Sociedad Española de Anatomía Patológica advirtió sobre el posible riesgo de contagio a partir de cadáveres, por lo que las funerarias no ofrecen ningún tipo de servicios de vela o ceremonias para los fallecidos por coronavirus.
Las funerarias no cuentan con suficiente equipo para atender la situación, pues no tienen mascarillas ni ropa de los llamados EPI (Equipo de Protección Individual). Además están utilizando el material de sus stocks pero no es suficiente y podría escasear en algún momento.
El consejero delegado del grupo funerario señaló que esta muy orgulloso de sus trabajadores pues se han comportado a la altura, sin embargo son necesarios los servicios de protección para los empleados.
Las restricciones para salir a la calle complican la asistencia a velatorios y funerales por lo que los familiares de los fallecidos no tienen la oportunidad de despedirse, pues todo el trámite debe realizarse por teléfono.
Algunas funerarias están empleando una dinámica para que las familias puedan presenciar las ceremonias de sus difuntos por Internet o vía streaming.
El psicólogo de la Fundación Salud y Persona ofrece apoyo emocional a los clientes y a los trabajadores de las funerarias para que puedan manejar mejor la crisis del coronavirus.
En Barcelona hay una valla a tres metros del nicho para que los trabajadores de las funerarias puedan introducir los ataúdes respetando la distancia indicada para evitar el contagio.
Con información de medios
ica