El pasado martes 17 de marzo, la Junta de Coordinación Política del Senado de la República sostuvo una reunión con el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, el Dr. Hugo López-Gatell Ramírez, quien ha sido designado como el vocero para informar sobre la situación del coronavirus (Covid-19) en el país.
En lo referente al ámbito nacional, el subsecretario realizó una explicación técnica y profunda de la situación, de la cual vale la pena rescatar los siguientes puntos. Primero, lejos de lo que se quiere hacer creer, la OMS ha reconocido que México fue de los primeros países en el mundo en establecer un protocolo para el diagnóstico de la enfermedad y confirma que se están haciendo las pruebas necesarias a todos los casos sospechosos.
De igual modo, ante la crítica de algunas instancias sobre el bajo número de casos reportados, el subsecretario López-Gatell mencionó que la búsqueda epidemiológica en México ha sido mucho más amplia que los casos confirmados. Del total de los que se han estudiado, el 90% resultó no tratarse del nuevo coronavirus.
Una de las partes más importantes de la explicación del subsecretario fue cuando ratificó que la expansión de la epidemia en el país será inevitable. Actualmente nos encontramos en la primera fase de la contingencia en la cual sólo hay casos importados y se logrará poner en aislamiento a la mayoría de las personas infectadas y a quienes tuvieron contacto con ellas.
La segunda fase será la de la transmisión comunitaria, en la que, por la abundancia de casos, se empezará a perder la cadena de contagio y se volverá inefectivo dar seguimiento caso por caso. En esa etapa, los mecanismos de contención serán complementados por otros de mitigación comunitaria, entre los cuales se encuentra la recomendación de la Secretaría de Salud de disminuir, desde el sábado 21 de marzo, la movilidad y concentración social.
A pesar de los esfuerzos realizados en estas dos fases, es muy probable que México entre a la fase tres de la contingencia, la de dispersión generalizada. En esta fase, el riesgo principal no es el incremento de casos de manera exponencial, sino que dos de cada diez de ellos requerirán hospitalización. Lo que se tiene que evitar en esa fase es que el sistema de salud se sature, impidiendo brindar la atención médica necesaria a quien realmente se encuentre en riesgo de perder la vida.
A lo largo de este proceso, se espera que la pandemia alcance un primer punto de inflexión, un incremento notorio de los casos en el país, en los próximos veinte días. En palabras del propio subsecretario, en esta etapa la suspensión de actividades tendrá mayor sentido, por lo que adelantar medidas solamente produciría efectos contraproducentes en todos los ámbitos.
Por ello, con base en la información presentada por el subsecretario, las y los integrantes del grupo mayoritario en el Senado de la República hemos decidido no suspender las actividades legislativas y esperar las indicaciones técnicas de las autoridades sanitarias. Éste es un momento en que el país necesita de la unidad y de la cohesión de los tres poderes de la Unión, por ello, mientras las circunstancias lo permitan, realizaremos todos los esfuerzos para brindar certidumbre, estabilidad y seguridad para que en unidad podamos superar el reto que representa la pandemia del coronavirus. Juntos lo lograremos.
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