Desde Oaxaca, a donde acudió a supervisar una obra carretera y sin guardar su sana distancia de los integra continuar con antes del presídium –contrario a los asistentes quienes les colocaron las sillas a un metro de distancia uno del otro- el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confió en “atemperar” la crisis que se avizora por el coronavirus y la caída en los precios del petróleo.
El mandatario federal, evitó comprometerse a dar continuidad a las obras, pues dijo, “si no nos pega mucho la crisis económica que se está avizorando y sintiendo ya por el coronavirus, por la caída en el precio del petróleo”, entonces sí se podría continuar con la construcción de infraestructura.
“Vamos a dejar obras para ver cómo nos va, si salimos adelante que eso es lo que yo espero, porque tenemos muchas fortalezas , tenemos reservas económicas, hemos acumulamos 10 mil millones de dólares de reservas el Banco de México y, aunque ha habido inestabilidad y depreciación de la moneda, yo he decidido -siendo respetuoso de la autonomía- que se cuiden esas reservas, que no se intente detener la depreciación del peso sacando reservas, que nos aguantemos”, declaró.
Acompañado del gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat y del secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, el mandatario federal, consideró que en la devaluación de la moneda y del precio del petróleo, existe un buen componente de especulación, “de quienes están sacando provecho de esta incertidumbre financiera”.
Ante ello, llamó a tener confianza y a seguir trabajando con honestidad, con austeridad, con eficiencia, para poder enfrentar la crisis, de la que aseguró “vamos a poder salir adelante, tenemos reservas y tenemos convicciones y un pueblo extraordinario, eso es lo mejor de México su pueblo bueno, honesto, trabajador, por eso hay que tener confianza”, pidió.
MGL