El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, criticó hoy el cierre de escuelas para combatir la pandemia de COVID-19, así como las decisiones de gobernadores que restringen la movilidad, además de refirirse a la enfermedad como “una gripecita”.

 

Durante su tercera conferencia televisada sobre la crisis, el mandatario brasileño mencionó una vez más que existe pánico e histeria en la población y culpó a los medios de comunicación.

 

“Extendieron el sentimiento de temor […] El escenario perfecto hecho posible por los medios para que la histeria se extendiera al país”, dijo Bolsonaro.

 

Sobre los gobernadores, Bolsonaro criticó las medidas de restringir el movimiento de personas. Asimismo, todos los estados de Brasil han suspendido las clases para evitar la propagación de la enfermedad, informó Folha do Brasil.

 

Ante ello, el presidente expresó en su discurso que “El grupo de riesgo (ante el COVID-19) está compuesto por personas mayores a 60 años. Entonces, ¿por qué cerrar las escuelas? Son raros los casos fatales, de personas sanas menores de cuarenta años”.

 

Contrario a las recomendaciones de la OMS sobre la reducción del contacto social, Bolsonaro manifestó que “nuestras vidas deben continuar” y llamó a la población a volver a la normalidad.

 

La posición de Bolsonaro ante la emergencia de salud pública ha ocasionado cacerolazos, como forma de protesta social, de manera diaria desde hace ocho días.

 

Brasil es el país más afectado de Latinoamérica por la pandemia de COVID-19. Al día de hoy ha registrado 46 muertes y dos mil 201 casos de contagio confirmados.

 

DAMG