El actor español Carlos Madrigal, dejó entrever que su padre, Antonio Madrigal, tuvo un mal diagnóstico medico, que lo llevó a la muerte por Covid-19.

“Llevamos a mi padre a urgencias el día 16 de marzo, ya que tenía mucha tos, grandes dificultades para respirar y una fiebre muy alta, con la que casi no se podía tener en pie, después de tres horas en urgencias le hicieron una radiografía y unos análisis y nos dijeron que tenía bronquitis”, escribió en sus redes sociales.

“Las recomendaciones médicas fueron: antibióticos, mucho líquido y a casita”, ahondó. Su padre era un hombre de 73 años, con marcapaso, que además presentaba los síntomas del coronavirus; sin embargo, en la primera visita al médico no le hicieron la prueba del COVID-19.

“Sin saber de medicina, considero que reunía todos los síntomas y más tomando en cuenta que el hospital aquí en Mallorca, todavía no tan está saturado como para pasar por alto un caso como éste”, comentó.

Sin embargo, tres días después su padre empeoró, fue hospitalizado, aislado durante días, para finalmente fallecer en soledad, hecho que acongoja al actor de Mi marido tiene más familia”.

“Lo más triste de toda esta situación que está afectando a España y al mundo en general, es que te digan que un ser querido va a fallecer, y no puedas pasar con el esos últimos momentos, cogerle de la mano antes de su partida y tenga que emprender ese viaje solo y aislado, cuando él reclama poder ver a su familia una vez más. Es duro no poder hacerle una despedida digna (funeral o entierro) como él se merecía; pero lo más duro es no poder sentir el abrazo cálido de tus familiares y amigos en estos momentos”, escribió en el largo mensaje que colocó en las redes sociales.

El actor subrayó que sólo una pandemia pudo acabar con la vida de su padre, que ya se había visto varias veces de cara con la muerte.

“Contigo no pudo ese accidente de tráfico en el que quedaste atrapado entre dos camiones y te dejó en coma durante dos semanas, con las costillas rotas y múltiples heridas, contigo no pudo la caída de un tejado a 15 metros de altura, no pudo la cogida de aquel toro en los encierros, ni una electrocución durante más de 30 segundos con unos cables de alta tensión, dos infartos, la rotura de las caderas, ni tan si quiera la Gripe A. Tuvo que venir una pandemia mundial para poder contigo”, compartió.

 

aarl