Dependencias y organizaciones sociales participantes en el programa de Atención al Migrante, establecieron una serie de estrategias para disminuir el riesgo de contagio de COVID-19 entre migrantes y personas repatriadas que permanecen alojadas en distintos albergues.
A través de la sesión del Consejo Estatal de la Población Zona Norte (Coespo), también se acordó identificar espacios alternos para la concentración segura de personas, a fin de disminuir la carga de los albergues que se encuentran funcionando actualmente.
Al respecto, el jefe de división del programa de Atención al Migrante, Dirvin García Gutiérrez, explicó que se buscará que estos espacios resguarden a un total de 50 a 80 personas, a fin de aminorar el hacinamiento que presentan.
Asimismo, subrayó que se promueve la sana distancia entre los migrantes, además de mantener en aislamiento y bajo observación a las personas de nuevo ingreso mediante un trabajo conjunto con la Organización Mundial por la Paz.
El funcionario indicó además que se instalará un albergue filtro para mantener en aislamiento por 14 días a los recién repatriados, a fin de canalizarlos a otros espacios que forman parte de la red de albergues.
García Gutiérrez explicó que una vez que el país entre en la Fase 3 de la contingencia epidemiológica, se contará con un espacio de referencia de confinamiento, en el cual acatarán las instrucciones que dicten autoridades del sector salud.
fahl