La agencia S&P Global Ratings recortó la calificación en escala global en moneda extranjera para Petróleos Mexicanos (Pemex), de BBB+ a BBB, y en moneda local, de A- a BBB+, debido a las complicaciones financieras de la empresa y los choques externos que pudiera sufrir en los próximos meses.
En un reporte, la firma detalló que mantiene una perspectiva negativa para la nota global, tal y como sucedió con el recorte de la calificación soberana de México.
A su vez, precisó que los precios más bajos del petróleo y el gas natural previstos para los próximos dos años pondrán en peligro la ejecución del plan de negocios de Pemex, puesto que un flujo de efectivo más débil limitará la capacidad de financiar por completo sus necesidades de inversión de capital.
En este contexto, detalló que existe un espacio limitado para que la petrolera mejore sus métricas crediticias en el corto plazo.
Añadió que la ayuda recurrente del gobierno, como contribuciones de capital, monetización de ciertos activos, una estrecha colaboración para disuadir el robo de combustible, entre otros factores, son insuficientes para resolver completamente las necesidades de financiamiento de la empresa; sin embargo, respaldan su historial de apoyo gubernamental.
De igual forma, consideró que con la política energética impulsada por la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, que reposiciona a Pemex en el centro del escenario y frena la participación de actores privados en el sector energético nacional, es evidente el aumento de incentivos gubernamentales para la empresa productiva del Estado.
aarl