Integrantes de la Diócesis de Querétaro acudieron a varios hospitales del estado con un sagrario, el cual contenía la “figura de Jesús Eucaristía”, donde oran para que la pandemia por el coronavirus “pase pronto”.
Varios feligreses al ver el sagrario, se arrodillaban para recibir las bendiciones de “Jesús sacramentado”, quien en la historia católica es el pan y el vino de Cristo.
“Sabemos que, en este momento de crisis, la fe es la fuerza y la que da respuesta a todas estas problemáticas”, expuso el vicario general de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril.
Para este “recorrido”, el personal de la Diócesis decidió subir el sagrario a una camioneta y así pasar a diferentes hospitales, entre ellos, al Hospital General de Querétaro, donde hay varios pacientes por COVID-19.
Asimismo, Lara Becerril afirmó que no sólo pedirá por los enfermos de coronavirus, sino también, por todos los enfermos; además de pedir que se acaba está enfermedad pronto.
“Primero orar por los enfermos, los que están en sus cuartos, no sólo los que tienen el covid o los que son sospechosos de covid, sino orar por todos los enfermos. Queremos orar muy, pero muy ferviente para pedir a Dios por el fin de la pandemia. Sabemos que esta enfermedad atañe a todo el mundo, todos prácticamente somos sujetos de riesgo, entonces queremos pedir a Dios que cese esta pandemia”, comentó el vicario.
La camioneta donde transportaron la imagen de “Jesús Eucaristía” y al vicario Martín Lara, partió desde el Seminario Mayor, al oriente de la ciudad hasta concluir en el mismo lugar.
“Así como Jesús recorría los pueblos, como recorría las ciudades, como Jesús iba entre las calles más de dos mil años, así como Jesús extendía sus manos para sanar a los enfermos, así como Jesús extendió su mano para tocar al leproso, para levantar con su mano a la suegra de Pedro, enferma, así como Jesús extendió su mano para resucitar a la niña de doce años, así es que Jesús recorrerá estas principales arterias de nuestra ciudad capital”, señaló.
La Diócesis de Querétaro compartió a través de su página de internet, distinta información sobre la enfermedad que se ha propagado a nivel mundial.
“La enfermedad y el sufrimiento se han contado siempre entre los problemas más graves que aquejan la vida humana. En la enfermedad, el hombre experimenta su impotencia, sus límites y su finitud. Toda enfermedad puede hacernos entrever la muerte. La enfermedad puede conducir a la angustia, al repliegue sobre sí mismo, a veces incluso a la desesperación y a la rebelión contra Dios”, concluyó Lara Becerril.
En distintos países que también han sido afectados por la pandemia, como Italia y Nicaragua, personal de varias iglesias realizaron algo similar, pues han sacado al “Santísimo Sacramento” pero con recorridos a pie.
EAM