Más de 1.6 millones de mexicanos que pertenecen a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se unirán en ayuno y oración este Viernes Santo para combatir los efectos de la pandemia de Covid-19.
El Presidente de la Iglesia, Russell M. Nelson, llamó a los miembros de cada país a ayunar para pedir con fe el control y fin de la pandemia que afecta a todo el mundo.
Durante la Conferencia General de la Iglesia, realizada este sábado 4 de abril, el Profeta instó a los miembros de la Iglesia a realizar un segundo ayuno en menos de 15 días para mitigar los efectos de esta enfermedad. Un primer ayuno se llevó a cabo por miembros de la Iglesia en todo el mundo el pasado 29 de marzo.
“Para todos aquellos cuya salud lo permita, ayunemos, oremos y unamos a nuestra fe una vez más”, dijo el presidente Russell M. Nelson en su discurso de la Conferencia General del sábado por la noche.
“Pidamos en oración por alivio de esta pandemia global.
“Invito a todos, incluidos los que no son de nuestra fe, a ayunar y orar este Viernes Santo, 10 de abril, para que se la pandemia actual se pueda controlar, los profesionales de la salud sean protegidos, se fortalezca la economía y la vida se normalice”, dijo.
El ayuno que realizan los miembros de la Iglesia de Jesucristo constituye el abstenerse de dos comidas consecutivas o dejar de ingerir alimento y bebidas por 24 horas.
Todas las personas de fe están invitadas a unirse a este ayuno mundial el Viernes Santo para pedir por el control y fin de la pandemia Covid-19 en el mundo.
fahl