Los estadounidenses pasaron el domingo de Pascua en el cierre patronal, ya que el número de víctimas de la nueva pandemia de coronavirus superó las 21 mil 300 muertes y más de medio millón de casos confirmados.
En la última señal de la interrupción provocada por la enfermedad, una de las plantas de procesamiento de carne de cerdo más grandes del país fue cerrada después de que los trabajadores se enfermaron, y su propietario advirtió que el país se estaba moviendo “peligrosamente cerca del límite” en los suministros para comestibles.
“Es imposible mantener nuestras tiendas de abarrotes abastecidas si nuestras plantas no están funcionando”, dijo Ken Sullivan, director ejecutivo de Smithfield Foods, en un comunicado el domingo.
Con casi todos los estadounidenses encerrados bajo órdenes de quedarse en casa para frenar la propagación de la enfermedad, muchos recurrieron a los servicios religiosos en línea para marcar el día más sagrado en el calendario cristiano.
Estados Unidos ha registrado más muertes por la enfermedad COVID-19 que cualquier otro país del mundo. Se reportaron aproximadamente 2 mil muertes por día durante los últimos cuatro días seguidos, el mayor número en y alrededor de la ciudad de Nueva York. Incluso eso se considera subestimado, ya que Nueva York todavía está descubriendo la mejor manera de incluir un aumento de las muertes en el hogar en sus estadísticas oficiales.
A medida que aumenta el número de muertos, el presidente Donald Trump reflexionó sobre cuándo el país podría comenzar a ver un retorno a la normalidad.
Las amplias restricciones a los movimientos no esenciales que se impusieron en las últimas semanas en 42 estados han afectado enormemente el comercio y han generado dudas sobre cuánto tiempo pueden mantenerse los cierres de negocios y las restricciones de viaje.
El número de estadounidenses que buscaban beneficios de desempleo en las últimas tres semanas superó los 16 millones.
La administración Trump ve el 1 de mayo como una fecha objetivo para relajar las restricciones de quedarse en casa, dijo el domingo el comisionado de la Administración de Drogas y Alimentos, Stephen Hahn. Pero advirtió que aún era demasiado pronto para decir si se cumpliría ese objetivo.
CS