Las autoridades españolas calculan que al menos 10 mil 700 adultos mayores en casas de retiro han fallecido a causa del coronavirus, una parte importante de ellas no han sido consideradas como tal por no llevar a los enfermos a los hospitales.
Sólo en la Comunidad de Madrid 2 mil 820 fueron estudiados con pruebas PCR y dieron positivo de 4 mil 250 que mostraron síntomas pero no se les estudió, por lo que su muerte se atribuye a coronavirus y se suma a la estadística de decesos nacionales, informó Europa Press.
Este problema se presenta en gran parte de las comunidades, tanto en casas de ancianos públicas como privadas y concertadas. Las regiones que mayores cifras tienen son Madrid y Cataluña, donde se han centrado las preocupaciones de los ciudadanos.
En Cataluña mil 898 adultos mayores han fallecido y mil 214 se encuentran hospitalizados, en Castilla y León, por su parte, han fallecido mil 802 residentes en estos hogares de cuidados especializados.
Este problema no es exclusivo de España, pues atañe a gran parte de la Unión Europea, Francia, que sólo contabiliza las muertes en hospitales, ha informado que solicitará las cifras de las residencias de ancianos para comunicarlas con regularidad a la prensa.
Mientras un conjunto de organizaciones de la sociedad civil en defensa de los Adultos Mayores en el Reino Unido, como Age UK han solicitado que se incluyan en el conteo los decesos en estos centros y que se informe con regularidad el número de pacientes que presentan, informó BBC.
El COVID-19 es una enfermedad que principalmente genera casos de gravedad y la muerte a pacientes de más de 60 años, por el deterioro propio de la edad en sus órganos y a las personas con afecciones previas, como hipertensión o diabetes, afirma Vineet Menachery, inmunólogo de la Facultad de Medicina de University of Texas para la organización AARP que protege los intereses de los mayores de 50 años.
CS