Autoridades de Nueva Zelanda reportaron hoy su día más mortífero por la infección de COVID-19 con cuatro decesos, de un total de nueve, desde la propagación del patógeno en el país.
La primera ministra Jacinda Ardern, indicó que las cuatro muertes serán un “recordatorio triste” para Nueva Zelanda, mientras se mantiene el nivel de infecciones a la baja, por lo cual llamó a la población a continuar con las medidas de confinamiento.
“También es un recordatorio de cuánto peor sería la propagación y el número de muertos si no hubiésemos tomado las medidas para romper la cadena de infección”, indicó la mandataria citada por la Radio New Zealand.
Por otra parte, la doctora Ashley Bloomfield, directora general del sector salud,anunció que las infecciones en Nueva Zelanda alcanzaron los mil 366 casos confirmados.
“Ahora no es el momento de relajarse. No debemos desperdiciar el buen trabajo que todos han realizado en los últimos 20 días”, indicó Arden, tras el anuncio de la autoridad de salud.
En tanto, debido a las violaciones del confinamiento y el distanciamiento social, la primera ministra confirmó que ya se han reportado mil 452 infracciones.
En su informe diario respecto al coronavirus, Ardern también anunció un nuevo paquete de apoyo para estudiantes, de todos los niveles, por mil dólares neozelandeses.
EFVE