Ante las constantes agresiones en contra del personal de salud en las calles, centros de trabajo e incluso afuera de sus domicilios, la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) pusieron en marcha el programa de apoyo de transporte seguro a este sector.
A partir de las 8:00 horas de ayer, autobuses de la FSTSE, así como de los Sindicatos Nacional de Trabajadores de la Salud (SNTSA) y del Nacional del ISSSTE (SNTISSSTE) arribaron a los siete hospitales con mayor número de trabajadores médicos y paramédicos y que están clasificados para atender a pacientes con Covid-19.
El personal del Hospital General de México, del Hospital Juárez, del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), así como el 1º. de Octubre, el Hospital Adolfo López Mateos, el Hospital Zaragoza y el Hospital 20 de Noviembre, abordó las unidades que harán recorridos previamente establecidos por los trabajadores y las autoridades, con el fin de dejarlos lo más cercanos posible a sus hogares.
Guadalupe Guerrero Avendaño, directora del Hospital General de México; y Gerardo García, secretario de la Sección 14 del SNTSA, confiaron en que otras instituciones, empresas y consorcios se sumen a este tipo de acciones, impulsadas por el líder nacional de la FSTSE, Joel Ayala.
De acuerdo con el representante sindical este programa de apoyo tendrá vigencia hasta que haya pasado la contingencia sanitaria. Dijo que son 14 autobuses, distribuidos en los 7 hospitales generales. Además, entregaron equipos de seguridad laboral al personal médico.
En semanas previas –mediante redes sociales– médicos y enfermeras han denunciado agresiones en su contra; entre ellas, aventarles café caliente, cloro, incluso en un hospital del IMSS se registró una agresión física hacia un enfermero por parte de los familiares de un paciente que falleció por coronavirus.
Incluso, recientemente, en Los Mochis, Sinaloa, a un grupo de enfermeros se les impidió abordar el transporte público.
Ante estos hechos, la dirección general del IMSS, el Gobierno federal, el Congreso de la Unión y otras instancias de gobierno y de la sociedad civil, se han sumado a la condena de los ataques ocurridos hacia los trabajadores que se encuentran en la primera línea de combate al Covid-19.
LEG