El uso de cubrebocas puede ayudar a prevenir los contagios de Covid-19, pero si no se usa de la forma adecuada, puede ser contraproducente, pues si las personas lo tocan en su cara con las manos contaminadas, es más probable que se contagien, alertan especialistas.
En la pandemia que se enfrenta actualmente, a nivel mundial hay polémica sobre quiénes deben usar las mascarillas, pero la Organización Mundial de la Salud (OMS) las recomienda solo para las personas con síntomas a fin de proteger su entorno y, para el personal médico que atiende a los enfermos por el coronavirus para evitar ser contagiados.
Los hospitalarios o las mascarillas N-95 son útiles, pero para el personal médico que está en contacto con los enfermos por Covid-19, coincidieron la doctora Gabriela García, viróloga por la Facultad de Medicina de la UNAM, y Óscar Sosa, especialista en epidemiología, en entrevista con 24 HORAS.
La población en general que tiene que salir a trabajar, ir al súper o usar el transporte puede usar los de tela, añadió Sosa.
“El cubrebocas sirve como una barrera física que evita el paso de partículas de gran tamaño, pero no evita el paso de micro partículas, por lo que en esta pandemia el uso de este funciona, protege nariz y boca; pero una desventaja sería la incomodidad de traerlo, pues hay quienes no están acostumbrados a usarlo y entonces al estar quitandolo y poniendolo se corre el riesgo de tocar la parte que atrapa las partículas, esto a su vez podría generar un contagio”, explicó la viróloga García.
“Para las personas que transitan las calles, porque tienen que ir a trabajar o salen a comprar la comida, el uso de cubrebocas casero es de utilidad”, coincidió García.
“Hay personas asintomáticas al coronavirus, pero éstas pueden empezar a transmitir la enfermedad por lo que el uso del cubrebocas ayudaría a reducir los contagios, evitando que el virus salga, sin embargo, la desventaja es que no evita del todo el contagio y hay que saber manipularlo”, advirtió Sosa.
“Para utilizarlos primero debemos lavarnos las manos y colocarnos el cubrebocas del elástico y ajustarlo a partir de las costuras; no tocarme la cara durante el tiempo que lo lleve, ya que nos podemos contaminar; para retirarnos el cubrebocas debe ser desde el elástico y desecharlo”, precisó el epidemiólogo.
Respecto al llamado que han hecho las autoridades de salud en México para que no toda la población use las mascarillas, Sosa consideró que las personas las usan para salir a la calle sin tener síntomas compran cubrebocas de uso hospitalario o mascarillas N-95, ignorando que con los cuidados necesarios una N-95 tiene una vida de 40 horas de uso continuo y las personas solo le dan de dos a cuatro horas de vida.
“Entonces lo más conveniente para este tipo de personas es el uso de cubrebocas de tela, porque así los insumos de uso hospitalario serán utilizados por el personal de salud que este en contacto con los infectados por Covid -19”, señaló el epidemiólogo.
GM fabricará mascarillas
Reuters
La unidad mexicana de la automotriz General Motors iniciará a fines de abril la producción mensual de 1.5 millones de mascarillas en una de sus plantas en el centro del país, para ayudar a enfrentar la contingencia del coronavirus, informño la empresa en un comunicado.
La meta inicial es fabricar unas 9 millones de mascarillas quirúrgicas en su complejo del Estado de México en los próximos seis meses, para donar una parte a hospitales públicos ubicados en los lugares donde la marca tiene operaciones y otra a empleados y distribuidores.
LEG