Un total de 56 tanqueros cargados con combustible esperan ingresar a los puertos mexicanos, de los cuales 21 han estado en línea durante más de una semana por la falta de capacidad de almacenamiento, a medida que la demanda cae debido a la baja de la actividad por el coronavirus.
Más de 20 embarcaciones han esperado una semana o más para descargar gasolina, combustible para aviones, diésel y gas licuado de petróleo en los puertos de México, según datos de Refinitiv Eikon.
México importa la mayor parte de su combustible y tiene una capacidad de almacenamiento muy limitada. La petrolera estatal Pemex y alrededor de una docena de importadores independientes suelen descargar al menos dos embarques de gasolina por día, en su mayoría procedentes de Estados Unidos.
En enero, Estados Unidos exportó 1.17 millones de barriles por día (bpd) de productos refinados a México, en línea con el promedio de 2019, según la Administración de Información de Energía de Estados Unidos.
Pemex, que importa principalmente en el mercado spot, no ha declarado fuerza mayor sobre las compras de combustible pese a que la demanda minorista de gasolina disminuyó un 60% y la de diésel cayó un 35% en las dos primeras semanas de marzo, según la asociación de minoristas de combustible del país ONEXPO.
El volumen total contenido en los 21 buques sería de al menos 4.2 millones de barriles, suficiente para unos tres días de demanda antes de la emergencia por el conoravirus.
Pemex no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
La mayoría de los buques que esperan descargar están anclados cerca de Pajaritos, el principal puerto de entrada de combustible importado a México. También hay cuellos de botella en los puertos de Manzanillo y Tuxpan, según los datos.
Los largos tiempos de espera para que los petroleros descarguen generalmente implican el pago de tarifas de estadía, que son de aproximadamente 20 mil dólares por día, dependiendo del tamaño del barco, los términos del contrato y a tarifa de flete acordada.