Luego de que ayer entró en vigor el asilamiento obligatorio en Jalisco, así como el uso de cubrebocas en la calle, y transporte público, con la aplicación de multas y arrestos para quienes no lo acate, el gobernador Enrique Alfaro dijo que espera que los ciudadanos actúen de forma responsable y nadie sea sancionado.
La intención, puntualizó, no es que la fuerza pública persiga a nadie, ya que lo único que piden es respeto a las medidas.
“El Gobierno no tiene ánimo ni de detener ni de sancionar o multar a nadie, queremos que las disposiciones y que los instrumentos que estamos poniendo al servicio de la gente se usen correctamente”, dijo.
LEG