Las mujeres con cáncer de mama deben continuar con su tratamiento para tener un mejor control sobre la enfermedad y mantener un buen estado de salud ante el riesgo de infección por COVID-19, afirmó la especialista en oncología, Alejandra Armengol.
“Los estudios publicados hasta el momento incluyen un número reducido de pacientes con cáncer y COVID-19, por lo que la información clínica es aún limitada para dar recomendaciones definitivas Esta información es muy dinámica y puede ir cambiando a medida que avance la pandemia en nuestro país”, señaló la experta en cáncer de mama.
Explicó que las mujeres que padecen esta enfermedad y adquieren COVID-19 tienen mayor riesgo de presentar complicaciones graves, especialmente si se encuentran recibiendo tratamiento activo basado en quimioterapia, terapias blanco, inhibidores de ciclinas CDK 4-6, radioterapia y cirugía.
Esto debido a que pueden producir una disminución en la respuesta del sistema inmunológico, lo que provoca mayor riesgo de contagio de cualquier enfermedad infecciosa.
Ante ello, resaltó que es importante mantener comunicación con los médicos tratantes involucrados debido a que ayudarán a resolver dudas y darán seguimiento a la atención y tratamiento de acuerdo con la valoración de cada paciente.
“El oncólogo realizará una evaluación personalizada de los riesgos y beneficios que su tratamiento actual le representa y elegirá la opción más eficaz y segura durante esta pandemia”, agregó mediante un comunicado.
Esta opción puede representar cambiar de tratamiento, suspender, retrasar e incrementar ciclos de éste, así como cambiar la frecuencia de administración o invertir el orden planeado inicialmente de su tratamiento oncológico.
ica