La industria automotriz estimó que a pesar de que se reactiven las actividades productivas del sector a mediados de este mes de mayo, las expectativas de ventas en el mercado interno son negativas y en su escenario más pesimista considera que al cierre de 2020 se podrían vender apenas 664 mil 424 unidades, esto es una caída de 49.5%.
En el documento “Escenario de ventas de vehículos ligeros 2020”, la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores (AMDA) señala que la economía global se contraerá por la pandemia por el Covid-19, y en el caso de México la expectativa promedio del impacto es de 6.6% para 2020, así la economía mexicana enfrenta “un impacto profundo y prolongado”.
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En general, el sector automotriz enfrenta uno de los panoramas más oscuros, tanto en el mercado interno como externo, pues según el documento de la AMDA, en su escenario base, es decir, positivo, el mercado interno enfrentaría una caída en ventas de 35.1%.
En el más pesimista, la baja total sería de 49.5 %, donde los meses críticos son abril y mayo con bajas estimadas de 80.7% y 84.1%, en ese orden, en los vehículos comercializados.
El estudio de la AMDA refiere que en 2019 se hilaron tres años consecutivos a la baja en el mercado interno, por lo que al desempeño negativo del sector se suma la perspectiva negativa por Covid-19. Así,la tendencia negativa en el sector ha continuado durante el primer trimestre de 2020.
El director general adjunto de la AMDA, Guillermo Rosales Zárate, expuso que en el mes de abril se comercializaron 34 mil 903 vehículos ligeros nuevos, esta cifra representó una disminución del 64.51% respecto al mes de abril del 2019, cuando se colocaron 98 mil 346 unidades.
Con cifras acumuladas en el periodo de enero a abril se registra la venta de 331 mil 580 vehículos ligeros, lo que representa una disminución de 23.12% en comparación al primer cuatrimestre de 2019, cuando se registró la venta de 431 mil 346 unidades.
Estos resultados se dan en el marco de la pandemia que “ha impactado negativamente al mercado automotor ante las medidas de aislamiento social decretadas por las autoridades sanitarias para hacer frente a los contagios, ocasionando la desconfianza e incertidumbre generada entre los consumidores y el deterioro de las condiciones económicas de muchas familias”.
Debido al acuerdo emitido por la Secretaría de Salud el pasado 31 de marzo, las distribuidoras tuvieron que suspender actividades en los pisos de venta. Y pesar de ello, la comercialización de vehículos ligeros fue menos mala a lo estimado por AMDA al iniciar el mes.
Rosales expuso que influyó favorablemente en el registro de vehículos comercializados el que se contabilizaron operaciones que se habían cerrado en el mes de marzo y de las cuales se tenía pendiente la entrega física del vehículo, como es la práctica administrativa del sector.
Otro factor favorable fue la concreción de algunas operaciones de flotillas, tanto del sector público como privado, que no se consideraron en la proyección de ventas.
Asimismo, mejoró la capacidad de ejecución de las ventas a distancia, al utilizar las tecnologías de la información por parte de los distribuidores y encontrar una mayor confianza de los consumidores para su realización.
No obstante, la expectativa continúa siendo negativa ante la suspensión de actividades que se mantiene durante el mes de mayo y el deterioro de la economía nacional que trae consigo el Covid-19.
Guillermo Rosales apunta que la AMDA ha solicitado la inclusión del sector automotor dentro de las actividades esenciales para reanudar operaciones en los pisos de venta y brindar sus servicios a la sociedad, lo que contribuiría a la reactivación económica y a la captación de impuestos.
EAM