La pobreza en México aumentará de 41.9 a 47.8%, mientras que la pobreza extrema subirá de 11.1 a 15.9%, debido a las consecuencias por la pandemia del Covid-19, la reducción en el envío de remesas y una contracción en el Producto Interno Bruto (PIB) del país, estimó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Al presentar su informe “El desafío social en tiempos del Covid-19”, refirió que estas cifras serán los mayores aumentos, para ambos rubros, en América Latina. Incluso, aseveró que en caso de reducirse las remesas provenientes de familiares que migraron de México, la pobreza en familias dependientes de estos ingresos podría escalar hasta 15.5%.
Este último dato se suma a otros pronósticos que prevén desplomes de remesas, como el de BBVA México que augura que los envíos de connacionales caerán hasta 17% en 2020, para quedar en casi 29 mil 900 millones de dólares, contra los 36 mil millones de dólares que se registraron en 2019, y podrían tardar más de 10 años en recuperar su flujo.
Según datos del Banco de México (Banxico), durante marzo de 2020, las remesas llegaron a cuatro mil 16.12 millones de dólares, lo que representó un crecimiento de 49% respecto al mes anterior y fue la cifra más alta desde que se tiene registro en 1995, gracias a la apreciación del dólar, al igual que a la preocupación de los connacionales para enviar dinero a sus familias por el Covid-19.
Por otro lado, Bárcena detalló que, si bien las estimaciones para la pobreza en el país consideran la caída en el PIB nacional de 6.5%, pronosticada por la propia Cepal, México está en el camino correcto para atender la crisis sanitaria, puesto que se están haciendo transferencias de recursos a personas de la tercera edad, con alguna discapacidad o aquellas con menores ingresos.
AR