Un grupo de aproximadamente 20 médicos, quienes laboran en el Centro Médico Nacional Siglo XXI, fueron trasladados al Autódromo “Hermanos Rodríguez”, espacio habilitado para atender casos leves de coronavirus en pacientes con enfermedades crónicas.
Uno de ellos -quien pidió el anonimato por cuestiones de seguridad- llegó alrededor de las 13:30 horas, esperaba a sus compañeros en un acceso al hospital, con quienes laborará en el espacio extraordinario habilitado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Él ha sufrido dos agresiones por desempeñar su profesión en tiempos de la pandemia -por eso es cauteloso al hablar de su trabajo- la más leve fue en el Metrobús La Raza donde le aventaron agua.
La más dolorosa, afirma, se la hizo un amigo, quien lo amedrentó en redes sociales y WhatsApp.
“Me avisaron hoy que mi lugar de servicio sería el Autódromo ‘Hermanos Rodríguez’ y allá vamos. Vamos a cuidar a pacientes infectados por el coronavirus y que tienen un antecedente crónico que condicione su salud”, explicó en entrevista con Notimex.
El médico aseguró que les ha sido entregado el equipo médico necesario para realizar su trabajo, no obstante tiene miedo ya que, asegura, se convertirá en un factor de riesgo para amigos y familia.
“Nos han dicho que estaremos a lo mejor un mes, lo más crítico de la pandemia aún no llega, entonces pienso que puede ser más tiempo. La gente tampoco está ayudando, no creen que pueden enfermar súbitamente”, lamentó.
“Tengo miedo, sé que no podré ver a mi familia y amigos por largo tiempo, pero igual comprendo que es mi responsabilidad servir en estos momentos”, advierte.
“¡Suerte!”, le grita don Miguel, quien vende tortas a los médicos desde las seis de la mañana.
“Suerte, sí, la vamos a necesitar, quizá con una pizca de responsabilidad y solidaridad al trabajo que tenemos que hacer”.
Se le cuestiona si le reprocha algo a la gente en estos momentos, cuando ha habido un repunte de infectados.
“No quiero sonar remilgoso, mucho menos que sea interpretado como una queja, pero sí veo desdén en la gente, sale sin cubrebocas, sin caretas, no guarda su sana distancia, cuando llegan enfermos nos reclaman, nos acusan de infectar a sus enfermos; la realidad es que aquí llegan con muy pocas posibilidades de sobrevivir.
“Ojalá no tuvieran que venir muy enfermos aquí para comprender que el coronavirus es lo más grave que estamos viviendo en la actualidad. Ojalá no tuvieran que perder a un familiar para comprender que salir es un riesgo, en tanto, aquí estamos para ayudarlos”.
El Autódromo “Hermanos Rodríguez” recibió a sus primeros cinco pacientes provenientes del Hospital General de Zona 47 en Iztapalapa.
EFVE