La secretaria de Economía, Graciela Márquez Colín, informó que del millón de créditos colocados a la palabra para empresas familiares, se han dispersado un total de 252 mil 015 préstamos, lo que equivale una inyección a la economía nacional de seis mil 300 millones de pesos.
En conferencia en Palacio Nacional, Márquez Colin indicó que este crédito “avanza lento” porque se ha cuidado y respetado la Jornada Nacional de Sana Distancia, así que los beneficiarios han tenido que esperar para recibir su préstamo de 25 mil pesos, a través de los bancos Azteca, Banorte o Santander, quienes para evitar aglomeraciones han establecido un programa de citas y horarios.
Sin embargo, detalló, el millón de créditos a la palabra lleva ya un avance de 25 por ciento y seguirá entregándose periódicamente en las próximas semanas para apoyar a esas familias empresarias que utilizarán el dinero tanto para pagar la nómina, comprar insumos o aquella cubrir la necesidad más urgente, como resultado de la crisis sanitaria.
Respecto al otro millón de créditos, que en una primera fase se repartió a 191 mil empresarios solidarios, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Zoé Robledo Aburto, indicó que este programa ya llegó a su fin.
Aclaró que sólo les resta hacer un último envío de correos electrónicos para los 46 mil empresarios que por tener su cuenta cancelada o bloqueada incluso porque se excedía el monto del depósito no pudieron recibir el crédito, y ahora con la misiva se les orientará para reactivarlo.
En su segunda fase, el crédito solidario a la palabra, dijo, ahora se destinará para un universo diferente de trabajadores afiliados al IMSS, como son las 22 mil 300 trabajadoras del hogar y para los 23 mil 717 empleados independientes.
De esos más de 46 mil nuevos créditos, Robledo Aburto dijo que ya cuentan con dos mil 143 personas registradas y con el crédito validado, 122 más que ayer, “no obstante, la evolución de estos préstamos no ha sido tan rápida, porque muchas de las personas al momento de que realizan su trámite por Internet se encuentran con la petición de la CLABE bancaria, no pueden concluir la solicitud porque no la tienen”.
Para solucionarlo, el director Ejecutivo de Banca Digital de Banorte, Miguel Valero Cañas, presentó una aplicación llamada PePer, la cual a través de un teléfono inteligente, sin una tarjeta física, permite hacer envíos de dinero, pagos a los amigos en redes sociales y también recibir depósitos, todo de manera digital, fácil, sencilla y sin comisiones.
Así, las trabajadoras del hogar que no cuentan con tarjeta bancaria, podrán bajar la aplicación y en minutos, con datos básicos como la Clave Única de Registro de Población (CURP), podrán tener su tarjeta electrónica y recibir el depósito de 25 mil pesos y retirarlo de inmediato o dejarlo ahí y pagar gastos, igual con la aplicación.
De esta manera, dijo el director del IMSS, Zoé Robledo, esperamos que las trabajadoras del hogar no vean detenida su solicitud de créditos por la falta de una herramienta bancaria, por lo que ahora esperan que el crédito a la palabra para las trabajadoras del hogar e independientes avance rápidamente.
DAMG