El premier británico, Boris Johnson, se vio sometido a duros ataques de los diputados británicos tras su defensa de un asesor imprescindible y controvertido, acusado de haber infringido el confinamiento, que le costó también al primer ministro una brusca caída de popularidad. En una videoconferencia del comité de enlace de las diferentes comisiones parlamentarias, el líder conservador fue acribillado a preguntas por unos legisladores saturados de mensajes enfurecido de sus votantes.
“La razón por la que no da a la gente una respuesta directa es porque no quiere incriminar a Dominic Cummings”, lanzó la opositora laborista Yvette Cooper ante los balbuceos de un Boris esquivo.
Pese a que Reino Unido es el tercer país más golpeado por el coronavirus, con 37 mil muertos, desde hace cinco días los medios británicos solo hablan del polémico Cummings.
En tanto, la mayoría de los brasileños apoya medidas de distanciamiento social más estrictas para combatir la pandemia del nuevo Coronavirus, según un sondeo de Datafolha publicado ayer.
Eso contrasta con la posición del presidente Jair Bolsonaro, quien ha atacado consistentemente las políticas de confinamiento, que buscan frenar la propagación del virus, por considerarlas un “veneno” que podrían matar a más personas debido al desempleo y el hambre.
El sondeo publicado en el diario Folha mostró que 60% de los brasileños apoya políticas más restrictivas, 37% se opone y 3% no está seguro o le resulta indiferente.
Brasil ha registrado más de 25 mil muertes debido al virus.
CIFRAS
400 kms condujo Cummings con su esposa e hijo, violando la cuarentena inglesa 60% de los brasileños apoyaría medidas más estrictas contra el Coronavirus
Con información de Agencias.
AR