Fumar siempre es peligroso, pero en tiempos de Covid-19, lo es aún más.

Este año el Día Mundial sin Tabaco se conmemoró en medio de una pandemia que ha dejado más de 6 millones 112 mil personas contagiadas y ha provocado al menos 370 mil muertes en todo el mundo.

El SARS-CoV-2, como su nombre lo indica en inglés, ataca y afecta especialmente a las vías respiratorias, por lo que la celebración de esta fecha (31 de mayo) cobra relevancia en estos momentos, pues su objetivo es desincentivar el uso de cigarrillos en menores de edad, ya que la prevalencia global de consumo entre adolescentes es de 5.7%, lo que representa un millón 304 mil 100 fumadores.

En México, cada año mueren más de 51 mil personas por enfermedades atribuibles al tabaquismo, es decir, 135 al día.

Por lo que la Secretaría de Salud, a través de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), advirtió que no fumar es una de las medidas preventivas más importantes para defenderse mejor ante el Covid-19.

A nivel mundial, el consumo de tabaco provoca más de 8 millones de muertes anuales, cifra que incluye un millón de fallecimientos causados por la exposición al humo de segunda mano de este producto.

Al mismo tiempo, el tabaquismo es factor de riesgo de seis de las ocho principales causas de muerte a nivel global, y ocasiona una de cada seis fallecimientos por Enfermedades No Transmisibles, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Gran parte del problema también son los químicos que se le agregan al cigarro para su venta.

La OMS advierte que el humo de este producto contiene más de 7 mil sustancias químicas, cientos de las cuales son tóxicas y afectan prácticamente todos los órganos del cuerpo. Además contiene al menos 69 carcinógenos que están involucrados en el desarrollo de varios tipos de cáncer.

El problema va más allá de las personas fumadoras, ya que quienes no lo hacen pero están expuestas al humo constantemente se encuentran en igualdad de riesgo de padecer enfermedades pulmonares y cardiovasculares graves.

La Ssa asegura que abandonar el consumo de tabaco puede mejorar la respuesta inmunológica frente al Covid-19, disminuir el riesgo de complicaciones y de muerte.

En caso de presentar síntomas leves, como tos, la recuperación puede ser más rápida y reduce el riesgo de transmisión de la enfermedad a otras personas.

El vapeo no es una opción

La OMS advirtió en el marco del Día Mundial sin Tabaco que el uso de cigarros electrónicos es igual de dañino que el consumo de tabaco en cualquiera de sus formas.

Por lo que aprovecharon la fecha para felicitar al Gobierno federal por la publicación del decreto que prohíbe la importación de sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN), sistemas similares sin nicotina (SSSN) y productos de tabaco calentado.

Por lo tanto, la Ssa, pidió a la población a través de un comunicado no utilizar estos aparatos por los riesgos que conllevan.

“Usar cigarrillos electrónicos durante el periodo de confinamiento por la pandemia del Covid-19, puede complicar el estado de salud de las y los consumidores, debido a que disminuye la capacidad del organismo para defenderse de las enfermedades respiratorias y puede agravar el cuadro clínico de quienes están contagiados con el virus SARS-CoV-2”.

Además, la dependencia explicó que las otras formas de consumo de tabaco aumentan la posibilidad de transmisión del virus debido a que, al fumar, los labios están en contacto con los dedos y los cigarros o los aparatos que se utilizan para el consumo de tabaco, como las pipas de agua, que a menudo implican compartir las boquillas y mangueras.

Tabla
El tabaquismo es el principal factor de riesgo de las siguientes enfermedades:

1. Cáncer de pulmón: causa 1.8 millones de muertes cada año, el riesgo de contraerlo a lo largo de la vida aumenta 22 veces en las personas que fuman.

2. Tuberculosis: 1,6 millones de personas perdieron la vida como consecuencia de este trastorno en 2019. El consumo de tabaco aumenta sustancialmente el riesgo de padecerla y de morir por ella en un 20 por ciento.

3. Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC): causa episodios de dificultad para respirar, tos y producción mucosa que, pueden durar desde unos días a varios meses y, a veces, pueden provocar la muerte.

4. Asma: es una enfermedad crónica de las vías respiratorias, más de 235 millones de personas sufren este padecimiento. La inhalación de humo del tabaco es uno de los principales factores desencadenantes del desarrollo o empeoramiento de esta enfermedad.

LEG