Foto: Reuters Los miembros del servicio secreto, a su vez, rodearon el área para hacer un camino donde pasaría el presidente  

El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, fue quien dio la orden de liberar el camino con policías equipados como antimotines para arribar a la iglesia de Saint Joan la tarde del lunes, donde se tomaría una foto con una biblia.

 

De acuerdo con la investigación de The Washington Post, Barr dio la orden directa de despejar el área para que el presidente pudiera pasar hacia la iglesia, reveló un oficial del Departamento de Justicia, y aseguró que debía hacerse de forma rápida, pues Trump le dio dicha tarea al fiscal.

 

Los policías del parque que rodea la zona fueron provisionados con equipo antimotines para despejar el área y empujaron a manifestantes, cuando se negaron a moverse, porque la protesta era legal, los miembros de las fuerzas de seguridad emplearon gases lacrimógenos y balas de goma.

 

Los miembros del servicio secreto, a su vez, rodearon el área para hacer un camino donde pasaría el presidente, en coordinación con el primer equipo que despejó el área cercana al centro religioso. El presidente llegó media hora después, cuando ya no había manifestantes.

 

Las autoridades han dado dos versiones oficiales sobre la razón del despeje del área, la primera es porque intentaban que las personas se alejaran porque iniciaría el toque de queda, mientras que la segunda apunta a que fue una decisión para extender la zona de seguridad de Washington DC, ninguna de ellas se refiere a la visita a la zona del presidente.

 

 

AR