“No se puede volver a jugar hasta que la situación sea segura por completo” en el plano sanitario, estimó este jueves Rafael Nadal, número dos mundial, que admitió que “odia la idea” de jugar partidos a puerta cerrada.
El tenis mundial está detenido desde marzo por la pandemia del nuevo coronavirus y es seguro que no regresará antes de, al menos, principios de agosto.
“Echo de menos jugar al tenis, echo de menos jugar mis torneos favoritos. Pero al mismo tiempo no tengo la cabeza en eso. Mi ánimo está concentrado en la idea de llevar una vida normal en el plano personal, es lo primero que hay que hacer. Después ya intentaremos organizar nuestras vidas profesionales”, señaló Nadal este jueves en una videoconferencia con varias agencias de prensa.
“El tenis es un deporte globalizado, con gente que viene de todo el mundo, así que es un deporte difícil de reimpulsar. Creo de verdad que hay que mantener la calma, ser pacientes y trabajar día a día en las soluciones, pero al mismo tiempo debemos enviar un mensaje fuerte y muy claro a la sociedad. No se puede volver a jugar mientras que la situación no sea segura por completo en términos sanitarios y justa en lo que se refiere a que todos los jugadores, vengan de donde vengan, puedan viajar y jugar torneos en condiciones seguras”, señaló.
El jugador doce veces campeón de Roland Garros, que cumplió el miércoles 34 años, se mostró muy cauto sobre las fechas de regreso de la competición.
“Si me dices (si se va a jugar el Abierto de Estados Unidos desde el 24 de agosto), diría que no. En unos meses, no lo sé. Espero que sí”, opinó sobre si cree que habrá gira norteamericana en agosto o si considera que la reanudación del circuito ATP seguirá aplazándose.
“Debemos esperar a que la gente tenga una vida normal. Cuando sea así, hay que esperar para ver cómo evoluciona el virus. Es muy difícil para mí separar lo que vive el mundo de mi punto de vista con el tenis, por eso era muy pesimista hace unas semanas. En mi estado de ánimo, si todo el mundo sufre, si mucha gente muere por esta pandemia, no se puede pensar en organizar un gran evento deportivo con gente procedente de todo el mundo. No sería realista”, subrayó.
Hay que ser responsables
Nadal considera que la situación es ahora “un poco menos negativa”, pero negó sentirse más optimista: “No, no puedo predecir qué pasará en los próximos meses. Mi posición no ha cambiado. Debemos tener responsabilidad”.
Las grandes ligas europeas de fútbol están regresando con un estricto protocolo y sin público en la grada, pero al mallorquín no le gusta nada la idea de jugar ante unas gradas vacías, aunque se resignaría a hacerlo.
“Odio la idea, pero si es la única solución, ¿por qué no? No concibo el tenis sin la energía del público, sin la pasión que un estadio lleno te aporta. Pero si es así, si tenemos que jugar sin espectadores, lo haría”, apuntó.
LEG