Martha Hilda González Calderón
Cuando en medio de un conflicto, el conciliador establece su intermediación en los siguientes términos: “firme con el problema, suave con las personas”, seguramente desarma a la parte más retadora y abre un universo de oportunidades de conciliación y entendimiento. Porque la conciliación permite que quien la pone en práctica, facilite el diálogo, generando un ambiente de respeto y confianza en donde posiciones intransigentes son superadas por los intereses de las partes, entendidos éstos como “las necesidades reales a ser satisfechas”.
La conciliación es uno de los pilares fundamentales —junto con la democracia sindical— de la reforma laboral. Se erige como la instancia previa a la etapa jurisdiccional y le corresponde llevarla a cabo al Centro de Conciliación Laboral. El contar con personal especializado y debidamente certificado, será la garantía de construcción de acuerdos efectivos, entre las partes.
El Estado de México se prepara para ser una de las primeras entidades federativas que concretarán la reforma laboral en el mes de octubre del 2020, a partir de que el Centro Estatal de Conciliación Laboral y los Juzgados Laborales, dependientes del Poder Judicial, inicien sus funciones. Este trascendental paso fue posible gracias al apoyo del Gobernador Alfredo Del Mazo Maza, quien instruyó dar cumplimiento a las reformas a la Ley Federal del Trabajo de 2017 y las correspondientes a la legislación estatal del año 2018. El Estado de México será entonces, modelo en el respaldo a los compromisos que, en materia laboral, fueron acordados con Estados Unidos y Canadá en el marco del Tratado de Libre Comercio, (T-MEC); pero también porque tenemos la convicción clara de que es un paso importante en la impartición de la justicia laboral.
Con esta reforma concluyen más de cien años de trabajo continuo de las Juntas Locales de Conciliación y Arbitraje, para atender los asuntos laborales de las distintas demarcaciones del País. En el Estado de México se prevé que las Juntas a partir de octubre no reciban una demanda laboral más y estén concluyendo los juicios en trámite, en el año 2023.
En esta nueva etapa, el Centro Estatal de Conciliación Laboral inicia con una naturaleza jurídica fuerte, al ser constituido como un organismo público descentralizado. Además, será a quien corresponda desahogar la instancia conciliatoria antes de acudir a los tribunales laborales, de acuerdo con lo que establece el artículo 590-F de la Ley Federal del Trabajo. Es alentador que haya sido propuesto como titular, Julio Cesar Vanegas, abogado de amplia trayectoria en el servicio público. Su llegada augura la solidez y eficacia de la nueva institución conciliatoria.
El Centro de Conciliación Laboral del Estado de México se conducirá bajo los principios de certeza, independencia, legalidad, imparcialidad, igualdad, confiabilidad, eficacia, objetividad, profesionalismo y transparencia, de acuerdo a lo que señala el artículo 590-F de la Ley Federal del Trabajo; cumpliendo además, con los estándares señalados por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en su recomendación 092 de 1951.
Una de las ventajas de esta instancia administrativa será que el procedimiento de conciliación no debe exceder los 45 días naturales, (art.684-D). Además, la Ley Federal del Trabajo reglamenta dicho procedimiento, desde la recepción de la solicitud de conciliación hasta su conclusión. Y establece que deberá emitirse la constancia de haberse agotado la instancia o el respectivo convenio de conciliación, (art.684-E).
La conciliación laboral se inscribe en el repertorio de procedimientos de solución de conflictos que son externos al ámbito judicial y que se denominan: Medios Alternativos de Solución de Controversias, (MASC).
La conciliación busca una solución justa de un conflicto, en donde las partes contribuyen a construir la solución de manera conjunta, para esto es necesaria una relación de colaboración y un enfoque orientado a satisfacer sus verdaderas necesidades de manera autocompositiva.
Especial mención merece la Procuraduría de la Defensa del Trabajo, quien además de brindar asesoría y representación a los trabajadores, se prevé que active el procedimiento de conciliación. De acuerdo con lo señalado por Joyce Sadka, académica del ITAM, la Procuraduría puede promover la conciliación y con eso disminuir el número de asuntos que se envíen, a los juzgados laborales y en consecuencia, contener el potencial rezago que se pudiera generar.
Con la finalidad de garantizar un servicio de calidad, se capacitará a los aspirantes a conciliadores en la metodología de la conciliación, estandarizando el servicio del Centro de Conciliación Laboral. Se busca que tengan experiencia, preferentemente en áreas del derecho laboral o en alguna actividad afín. Se vigilará que haya una presencia equitativa entre hombres y mujeres y que quienes laboren en el Centro Estatal de Conciliación Laboral cuenten con el enfoque de perspectiva de género. Pero, sobre todo, se tendrá cuidado que los aspirantes tengan la certificación en conciliación laboral.
Gerardo Becker, Presidente del Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje del Estado de México, con estudios en Conciliación en Turín, Italia; recomienda a los aspirantes a conciliadores cuestiones prácticas que deben de observar. Entre otras, como el cuidado de su lenguaje corporal, la vigilancia de los gestos no verbales de las partes; así como hacer contacto visual con quienes participan en la conciliación, crear un ambiente de respeto e igualdad y una actitud de reconocimiento entre todos los participantes. Además de dar especial seguimiento a lo que las partes han manifestado, haciendo resúmenes de lo que se ha expresado, parafrasear y alentar propuestas de solución entre las partes, que propiciarán la construcción del convenio conciliatorio.
La Secretaría del Trabajo del Estado de México en coordinación con el CONOCER, construyó el estándar de competencia EC-1250: “Conciliación para la Solución de Conflictos en materia laboral”, como una aportación para contar con un instrumento que permita homologar la práctica de la conciliación y tener un reconocimiento válido para todo la República. Dicha certificación será la primera en estar oficialmente reconocida en este ámbito. Para lograrlo, además del invaluable apoyo del CONOCER, se tuvo la asesoría de Juan Manuel y Rafael Lobo, quienes aplicaron su larga experiencia en materia de conciliación para construir un modelo que empieza a aplicarse en el Estado de México pero que ayudará a todo el país.
Posibilita de igual manera, que se organice una red privada de conciliadores laborales certificados que coadyuven con los Centros Estatales de Conciliación Laboral y que permitan que la conciliación sea una práctica que esté al alcance de los trabajadores, empleadores, sindicatos y otras organizaciones del sector social.
El proceso de certificación de un conciliador de conflictos en materia laboral, se divide en tres etapas en las que en cada una, se evalúan los conocimientos y la práctica, en la preparación, la conducción y la conclusión de la sesión de conciliación laboral. Esto asegura la estandarización del proceso conciliatorio.
En el campo de las relaciones laborales, es bien sabido que trabajadores y empleadores poseen intereses distintos y que, en el caso de un conflicto individual o colectivo en el centro de trabajo, toca a la autoridad laboral facilitar la construcción de un acuerdo. Por eso es importante la existencia de una instancia de negociación, fuera del ámbito judicial, en donde se construya un consenso que procure satisfacer los intereses de las partes. El Estado de México será la primera entidad federativa en aplicar las nuevas reglas de la reforma laboral a través del inicio de operaciones del Centro Estatal de Conciliación Laboral, y tomando especial atención en la capacitación y la certificación que su personal deberá cumplir. Aspiramos a ser un modelo de buenas prácticas en materia de conciliación laboral, para todo el país.
@Martha_Hilda