Una intensa temporada de incendios en la selva amazónica este año podría abrumar los sistemas de salud y provocar muertes innecesarias, incluidas por el coronavirus, ya que la contaminación empeora las afecciones respiratorias, dijeron el miércoles expertos en salud pública.
Los incendios forestales destruyen miles de hectáreas de selva amazónica en América Latina cada año. A medida que se acerca la temporada alta de conflagraciones, los expertos dicen que las intensas llamas y las partículas que emiten podrían exacerbar las infecciones por coronavirus.
“Está bien establecido que la exposición crónica a estas pequeñas partículas aumenta el riesgo de enfermedades respiratorias, enfermedades cardiovasculares y muerte prematura”, dijo el expresidente del Instituto de Medicina de Estados Unidos, Harvey Fineberg, a periodistas en una conferencia de prensa virtual.
Las infecciones por coronavirus en América Latina superan los 1,7 millones y más de 83 mil 500 personas han muerto en la región, según un recuento de Reuters.
Manaos, una ciudad de 2 millones de personas en el corazón de la Amazonía brasileña, ya ha sido fuertemente afectada por el virus, con entierros masivos necesarios para mantenerse al día con las crecientes muertes.
Al otro lado de la frontera, el departamento colombiano de Amazonas también ha tenido problemas con las altas tasas de infecciones por coronavirus. La región tiene una población de alrededor de 66 mil personas y ha reportado más de 2 mil 100 casos.
Los temores sobre los efectos causados por la contaminación durante la pandemia de coronavirus también se han escuchado en Chile, y los expertos advierten sobre una “tormenta perfecta”, ya que un invierno frío hace que la gente queme más madera, especialmente en el sur del país.
Un aumento en las hospitalizaciones por enfermedades respiratorias luego de incendios forestales pondría presión adicional en los hospitales que ya están luchando con el coronavirus, dijo la profesora de salud pública de la Universidad de Harvard, Marcia Castro.
Además de afectar a las comunidades en la Amazonía, las partículas de humo pueden viajar y causar problemas en otros lugares, precisó.
“Los efectos sobre las afecciones respiratorias no se limitan a las fronteras amazónicas”, agregó Castro. “Una intensa temporada de incendios podría tener consecuencias devastadoras para la salud pública con la pérdida innecesaria de muchas vidas”.
CS