Foto: AFP Desde el inicio del conflicto en Siria, en marzo de 2011, el régimen de Bashar al Asad ha sido acusado de violaciones de los derechos humanos  

Siete sirios y sirias, víctimas o testigos de violaciones y abusos sexuales en los centros de detención del régimen de Bashar al Asad, presentaron una denuncia ante la justicia alemana, informó el jueves la ONG alemana ECCHR.

 

La fiscalía federal, con sede en Karlsruhe (suroeste), no se pronunció al respecto por el momento.

 

Esta denuncia, que coincide con el primer juicio en el mundo contra los abusos presuntamente cometidos por las autoridades de Damasco que se celebra desde abril en Alemania, señala sobre todo a nueve responsables del gobierno sirio y a los servicios de inteligencia de la aviación, agregó la ONG, que apoya a los demandantes.

 

Entre ellos, está el antiguo responsable de los servicios de inteligencia del ejército del Aire, Jamil Hassan, en el cargo hasta 2019 y cercano al presidente sirio, que es objeto de sendos mandatos de detención internacional de Alemania y Francia. La justicia alemana sospecha que perpetró “crímenes contra la humanidad”.

 

Estos demandantes, cuatro mujeres y tres hombres, fueron encarcelados en diferentes centros de los servicios secretos de la fuerza aérea en Damasco, Alepo y Hama.

 

Entre abril de 2011 y agosto de 2013, todos fueron víctimas o testigos de tortura y de violencia sexual, como “violaciones, electrochoques en las partes genitales, desnudez obligada o incluso el aborto forzado”.

 

Desde hace tres años, las demandas contra responsables sirios por actos de tortura perpetrada en las mazmorras del régimen se han multiplicado en varios países europeos, en particular en Alemania donde la justicia se ha mostrado activa ante las exacciones bien documentadas por las ONG y testigos refugiados en Europa.

 

Unos 800 mil sirios han sido acogidos en Alemania, el mayor contingente en Europa.

 

Estos recursos se apoyan en el principio de justicia universal que permite a un Estado perseguir a los autores de crímenes independientemente de su nacionalidad o del lugar donde se perpetraron.

 

Desde el inicio del conflicto en Siria, en marzo de 2011, el régimen de Bashar al Asad ha sido acusado de violaciones de los derechos humanos y de estar involucrado en múltiples casos de torturas, violaciones y ejecuciones sumarias en los centros de detención.

 

 

 

AR