Foto: Reuters El sábado por la noche, el presidente Donald Trump, quien busca la reelección en noviembre, sostuvo un evento masivo en Tulsa, Oklahoma, aunque el estadio no se llenó como esperaban los republicanos.  

No conforme con el revés que recibió la semana pasada por parte de la Suprema Corte, el presidente estadounidense considera que su proyecto de anular el programa de apoyo a los jóvenes que fueron llevados de niños a ese país (DACA) avanza… y amenazó con otra embestida.

La víspera, desde la Casa Blanca declaró un portavoz que el Gobierno de Donald Trump está determinado a poner fin -en seis meses-, a los beneficios para los llamados “dreamers”.

Y es que su administración ve al programa como un esquema ilegal… lo mismo que la Corte, afirmó ayer el responsable en funciones del Departamento de Seguridad Interior, Chad Wolf, en una entrevista con la NBC, a pesar que el organismo judicial falló contra el plan del Gobierno para terminarlo, como pretende el mandatario republicano.

“En ninguna parte de esa decisión dijeron que el programa era legal. Simplemente no les gustaron la lógica y los procedimientos que usamos”, sentenció Wolf.

El jueves, la Corte Suprema bloqueó el esfuerzo de Trump de poner fin a la política de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia establecida por el expresidente Barack Obama, que protege de la deportación a casi 650 mil inmigrantes.

La decisión ratificó otras medidas de tribunales de menor instancia que hallaron que una iniciativa de Trump de 2017 para rescindir el programa era ilegal aunque no está imposibilitado de tratar de finalizar el programa de nuevo.

El sábado, Trump reiteró que intentará otra vez el proceso antes de las elecciones de noviembre, aunque no dio detalles de los argumentos.

“Si lees la opinión, ganamos. Pero tenemos que volver a hacer una presentación. Y todo saldrá bien para DACA y los jóvenes”, señalo el Presidente en una entrevista.

Al preguntarle cuándo presentaría una nueva propuesta dijo que muy pronto.

El programa permite a los jóvenes trabajar, estudiar y conducir; si no existiera, estarían condenados a vivir sin papeles. Y es que el razonamiento del plan implementado en 2012 implica que los menores no tienen otra residencia fuera de EU, y quizás tampoco más familiares. Es probable que no conozcan otro país, pues fueron llevados por sus padres.

Restringirá visas a los extranjeros

El Presidente Donald Trump también adelantó que en los próximos días anunciará nuevas restricciones a las visas para bloquear la entrada de ciertos trabajadores extranjeros y proteger a los estadounidenses que luchan con un mercado laboral devastado por la pandemia del Covid-19.

Cuando se le preguntó si habría exclusiones de las nuevas restricciones, Trump dijo que muy pocas: “Son necesarias para las grandes empresas que tienen a ciertas personas que han estado llegando durante mucho tiempo, pero muy poca exclusión”, señaló el republicano, quien se negó a dar más detalles.

Sus críticos han dicho que el mandatario está dispuesto a usar la pandemia para lograr su objetivo de limitar la migración a Estados Unidos. Su postura dura sobre la inmigración es central en su discurso de campaña

… Y ‘bromea’ sobre coronavirus y pruebas

Luego de justificar la baja afluencia a su evento, culpando a las personas que protestaban en contra de su administración afuera del recinto, Trump defendió su respuesta a la pandemia del Covid-19.

Dijo que más pruebas habían llevado a identificar más casos, aparentemente para su disgusto: “Cuando haces pruebas hasta ese punto vas a descubrir más casos”, señaló, “entonces le dije a mi gente: disminuyan los controles “.

Más tarde, un funcionario de la Casa Blanca dijo que “estaba bromeando”.
LEG