Con un pie en Estados Unidos, país al que asistirá para reunirse con su homólogo Donald Trump, el presidente Andrés Manuel López Obrador -quien forma parte de la población vulnerable al tener 66 años- y parte de su gabinete podrían estar en riesgo de contraer Covid-19.

 

Ello luego del contacto que tuvo hace tres días con el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien ayer informó que dio positivo a SARS-Cov-2, que tenía síntomas leves y ya estaba aislado.

 

Al respecto, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, informó que ya realizan el estudio de contacto a las personas que estuvieron con el funcionario; no obstante, evitó responder si López Obrador está incluido en el análisis.

 

En el caso de la secretaria de Economía, Graciela Márquez, quien también convivió con Herrera, ésta anunció que se mantendrá en resguardo de manera voluntaria, pese a no tener síntomas, “si no lo hubiera hecho se lo habríamos recomendado”, advirtió López-Gatell.

 

Según el Programa de Detección, Protección y Resguardo de Casos (Coronavirus) COVID-19 y sus Contactos, implementado por el Gobierno de la CDMX para tratar de controlar un contagio expansivo, al Presidente y parte de su gabinete se le sugeriría ponerse en cuarentena, y en caso de presentar síntomas realizarse una prueba.

 

López Obrador pretende viajar a Estados Unidos en un vuelo comercial, y deberá pasar los protocolos de salud establecidos por los aeropuertos y las aerolíneas, como la toma de temperatura, el uso de cubrebocas, mantener una sana distancia y llenar un formulario que solicitan las autoridades federales sobre si ha tenido síntomas de Covid o ha estado en contacto con alguna persona contagiada en los últimos días, según refirieron agencias de viajes consultados por 24 HORAS.

 

ACTIVIDADES PRESIDENCIALES

 

El lunes pasado, el titular de Hacienda estuvo al lado del Jefe del Ejecutivo en el despacho presidencial, sitio en el que grabaron un video para anunciar el enroque entre el Banco del Bienestar y la Secretaría de Gobernación.

 

Herrera estuvo a menos de un metro y medio del mandatario; en tanto Olga Sánchez Cordero, titular de Segob, tampoco guardó la sana distancia, pese a que por su edad (73 años) se encuentra entre la población vulnerable a la enfermedad de Covid-19.

 

En la reunión también estuvieron Diana Álvarez y Rabindranath Salazar, quienes intercambiaron cargos en las áreas citadas.

 

El 23 de junio, el mandatario se reunió con los secretarios de la Defensa Nacional, Marina y Seguridad y Protección Ciudadana, Luis Cresencio Sandoval, Rafael Ojeda y Alfonso Durazo, luego del sismo de magnitud 7.5.

 

Previamente, en su conferencia, estuvo con los secretarios de Relaciones Exteriores y de Salud, Marcelo Ebrard y Jorge Alcocer, respectivamente, así como López-Gatell.

 

Al día siguiente, el Presidente convivió con los integrantes del gabinete de seguridad, Sánchez Cordero y el coordinador de Protección Civil, David León, así como con la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, quien rompió con sus teleconferencias para dar la bienvenida a La Mañanera.

 

La mandataria capitalina incluso se quitó el cubrebocas que portaba para hablar por el mismo micrófono que el Presidente.

 

Ayer, López Obrador se reunió con el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo; y hoy estará al lado del gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles.

 

ERA UNA ALERGÍA, DECÍA

 

Mientras que Arturo Herrera estuvo en conferencia de prensa la tarde del miércoles, junto al secretario de Desarrollo Urbano, Román Meyer. Y el 18 de junio acompañó a López Obrador a Hidalgo, donde supervisó obras en escuelas junto con el secretario de Educación, Esteban Moctezuma.

 

En un foro virtual con Concanaco, llevado a cabo el 19 de junio, el titular de Hacienda aseguró que tenía una alergia y no Covid-19, ello, ante un semblante visiblemente constipado y estornudos que atajaba tapándose la nariz con sus manos sin implementar las medidas de higiene recomendadas; seis días después dio a conocer que sí es positivo al coronavirus.

 

En tanto, el subsecretario de Salud explicó que la prueba diagnóstica de Covid-19, no se puede hacer por la sospecha de haber sido contagiado.

 

“Si me hago la prueba hoy, pero la fecha del posible contagio está muy cerca -menos de seis días- lo más probable es que la prueba salga falsamente negativa. Lo que es prioritario es hacer la entrevista médica epidemiológica, que tiene una técnica estructural para saber la probabilidad de que haya obtenido el contagio”.

 

Detalló que si en dicha entrevista, la persona es positiva, se le hace la prueba diagnóstica, “si la persona es negativa se le deja en observación por al menos seis días, que es el período estimado de incubación. Si no presenta síntomas y no es una persona que esté en riesgo de complicarse, podría ser incluso innecesaria la prueba. Si presenta síntomas y es una persona en riesgo de complicarse se le debe hacer la prueba y, si existe un riesgo significativo de que pudiera propagar también se le hace la prueba”, señaló.

 

ANÁLISIS EN LA CDMX

 

Al corte del 25 de junio, el Gobierno de la CDMX había contactado a 6 mil 632 personas con un resultado positivo de Covid-19. A partir de ellas, se localizó a 2 mil 283 personas con las que tuvieron contacto desde tres días antes de haber presentado síntomas y se identificaron otros 137 casos positivos.
En días pasados, el presidente López Obrador reconoció que “es un virus muy traicionero que nos anda rondando”. Y al ser cuestionado sobre las medidas que toma para no contagiarse, respondió que “no mentir, no robar, no traicionar, eso ayuda mucho para que no dé el coronavirus”.