El último año de Fernando Valenzuela con los Dodgers quedó enmarcado para la posteridad el 29 de junio de 1990, fecha en la que lanzó un juego sin hit ni carrera, el único de su trayectoria.
El dominio del Toro de Etchohuaquila en el montículo ya no era como en los primeros años de la década de los 80, aunque seguía contando con la confianza de Tom Lasorda como estelar de los angelinos.
El mexicano tuvo una salida más en su carrera, aunque nadie esperaba que fuese una noche inolvidable, más por lo que ocurrió horas antes.
En el Rogers Centre de Toronto, Dave Stewart blanqueó a los Blue Jays mediante un no-hitter. Valenzuela y el resto del equipo observaron ese juego en vivo desde los vestidores del Dodger Stadium. Cuando terminó y fue turno para que salieran a jugar, el Toro dijo: “Bueno, ya vieron un juego sin hit no carrera por televisión, ahora van a ver uno aquí”.
Valenzuela corroboró esta frase tiempo después al igual que sus compañeros, aunque añadió algo. “Yo sé los dije, pero en broma. No creí que iba a pasar realmente”.
Sin embargo, ya en el diamante, Valenzuela comenzó a lanzar y a sacar los outs. Retiró a siete bateadores por la vía del swing, aunque otorgó tres pasaportes a primera, lo que le impidió lograr la perfección.
Sus compañeros lo apoyaron a la ofensiva al colgar seis argollas y darle la confianza suficiente para lograr la hazaña.
En la parte baja del noveno inning, Valenzuela sacó el out 27 a través de un doble play para tendidos a los Cardinals con pizarra de 0-6.
Dodger Stadium celebró la última gran hazaña del Toro de Etchohuaquila con la franela de los Dodgers y su nombre quedó más que inmortalizado tanto en la franquicia angelina como en todas las Grandes Ligas.
DATO INCANSABLE
Fernando Valenzuela lanzó 119 pitcheos ante los Cardinals, de los cuales 79 fueron cantados como strike. Aún tenía lumbre en el brazo.
DAMG