Si en la 4T quieren alguna buena noticia económica, pueden usar este dato de la encuesta más reciente que el Banco de México aplica entre expertos en economía: Hubo un aumento de 87% en el número de analistas que entre mayo y junio estiman que habrá de mejorar el clima para hacer negocios durante los próximos seis meses.
Es una verdad estadística, porque en mayo pasado solo 8% de los entrevistados pensaban eso y ahora en junio ya son 15%. Claro, 71% cree que el clima de negocios va a empeorar el resto del 2020. El 100% de los encuestados asegura que la economía está peor hoy que hace un año y no hay uno solo que se atreva a decir que este es un buen momento para realizar inversiones.
Pero como sea, hay datos para jugar con la confianza de los que todavía creen en esta “transformación”. Es mejor eso que asegurar que ya se domó la pandemia y que ya estamos en recuperación, porque eso es falso.
Y el problema de mentir con la economía es que una crisis no se maquilla tan fácilmente, porque se sienten sus efectos en el seno mismo de la familia.
Los encuestados por Banxico esperan que este año el Producto Interno Bruto no deje de tener caídas trimestrales durante todo el resto del año, hasta acumular un derrumbe anual de -8.80%.
Y para el próximo año el rebote será, de acuerdo con el promedio de lo que creen estos expertos, de apenas 2.8%. Y prepárense porque cuando venga el incipiente rebote de la economía mexicana durante el primer trimestre del próximo año y se tenga que comparar con la monstruosa cifra que habrá de resultar del primer trimestre, calculan los expertos -17.94%, habrá un dato positivo quizá superior a 5%. Se aceptan apuestas que nos cantarán que prometieron crecer al 6% y que lo lograron. Esto hay que tenerlo presente, porque lo van a intentar. Saben mentir y conocen las limitaciones de sus seguidores.
Cuando estos números se trasladan a las expectativas del empleo, estiman que un millón 135 mil mexicanos van a perder este año su fuente de trabajo y que, durante 2021, apenas 380 mil personas conseguirán un puesto formal.
Todo esto son estimaciones de expertos en economía sin formación epidemiológica. Porque incluso los expertos en temas médicos, los de verdad, no los que se la creen de rockstars de la política, no acaban de ponerse de acuerdo sobre qué pasará con la llegada de la temporada de temperaturas bajas en el hemisferio norte.
Algo en lo que parece haber contexto es en que tanto la inflación como las condiciones financieras podrían mantenerse estables. Esto ayuda a no complicar la crisis con precios altos y a que un escenario de altas tasas de interés complique más un previsible aumento de la cartera vencida que se ve venir durante la segunda mitad del año.
La mejor manera de conseguir un respaldo optimista de alguna parte de la población es mostrando que se trabaja, no con cuentos chinos sobre una mejora económica que hoy es una total falsedad.
@campossuarez