La canciller alemana, Angela Merkel, cuyo país ejerce la presidencia pro témpore de la Unión Europea (UE), urgió este miércoles a los mandatarios europeos a alcanzar “pronto” un acuerdo sobre el plan de recuperación común.
“Si evaluamos bien la profundidad de la crisis, no tenemos tiempo que perder (…) Espero que este verano lleguemos a un acuerdo”, dijo Merkel, al presentar ante la Eurocámara en Bruselas el programa de trabajo de la presidencia alemana.
Tras una reunión con los jefes de las instituciones europeas, Charles Michel (Consejo), Ursula von der Leyen (Comisión) y David Sassoli (Parlamento), la canciller también expresó su deseo de que los Estados miembros “ratifiquen rápidamente” el plan de recuperación que se está negociando.
“Los participantes han acordado que la rápida conclusión de un acuerdo sobre un ambicioso plan de recuperación europea es la primera prioridad de la UE para las próximas semanas”, según un comunicado firmado por los cuatro líderes.
El 17 y 18 de julio, los mandatarios abordarán de nuevo el plan de recuperación de 750 mil millones de euros (840 mmdd) para salir de la profunda recesión en 2020 causada por la pandemia.
Una cumbre por videoconferencia a mediados de junio ya plasmó las diferencias entre los 27 sobre cómo pasar página a la crisis del Coronavirus, que ha dejado en Europa más de 200 mil fallecidos y provocó cierre de empresas y despidos.
Michel prepara ahora una propuesta de plan de recuperación y de presupuesto plurianual para el período 2021-2027 aceptables por los 27, mientras los encuentros para allanar el camino se suceden.
Las miradas se centran sobre todo en los llamados “frugales” (Países Bajos, Austria, Suecia y Dinamarca), adeptos del rigor fiscal, que se oponen a aspectos del plan, que beneficiará sobre todo a los países del sur más afectados por la crisis.
Esos países, liderados por La Haya, abogan por que los fondos se concedan en su mayoría mediante préstamos y no como subvenciones, invirtiendo la actual tendencia, y por aplicar criterios estrictos a su concesión.
La canciller alemana, alineada con estos países en el pasado, abogó por “hacer un esfuerzo extraordinario, por no decir único” y reiteró su apuesta por que medio billón del plan de recuperación se otorgue mediante ayudas no rembolsables.
“La principal prioridad de la presidencia alemana de la UE será la unidad de Europa para garantizar que Europa salga más unida de la crisis”, subrayó Merkel, para quien “nadie puede salir solo de esta crisis”. “Todos somos vulnerables”, advirtió.
La canciller alemana, que, según los analistas, busca dejar su legado político durante esta presidencia, aseguró que sus prioridades serán la cohesión, la lucha contra el cambio climático y la digitalización.
EFVE